Las aguas de los estanques de Isabel la Católica
Las obras para el dragado de los estanques del parque de Isabel la Católica han finalizado. Ésta era una labor muy necesaria y casi urgente ... al ser ya muy inferior la lámina de agua frente al volumen de sedimentos subyacente que se fueron depositando a lo largo de unos 40 años.
Al principio la obra sufrió un retraso importante de casi un mes. El dragado se inicia el 25 de enero en el estanque pequeño, previo traslado de aves y peces al estanque grande. A los pocos días los trabajos se paralizaron al no tener en regla el permiso de la Consejería de Medio Ambiente para la retirada y destino de los lodos.
Los comunicados que emite la EMA, empresa encargada de la obra, no son muy clarificadores de lo que está sucediendo, ni se cumplen las fechas que indican para el reinicio. De todo ello se puede desprender que la obra se comienza sin el permiso pertinente porque tampoco se ha enviado al Principado el resultado de la analítica de los lodos. Actitud osada.
El 14 de marzo se reanuda el dragado del estanque pequeño y a los quince días comienza su llenado de agua. ¿Pero cuál es la procedencia del agua? Se trasvasa agua del estanque principal, «con plenas garantías ambientales». Pues sí, los animales estaban viviendo en ella, pero es un agua que desde abril ocupa la cubeta del estanque pequeño y no ha mudado su color parduzco por estar ya demasiado 'vivida'. Operación inversa, traslado de aves y peces del lago grande al pequeño e inicio de su dragado que culmina ahora. ¿Pero para su llenado de dónde va a proceder el agua? La madre naturaleza, a través de la lluvia, no está dispuesta a colaborar, y ha de ser un agua limpia con todas las garantías químico-biológicas aseguradas. También al final la obra sufre un retraso de dos meses sobre el plazo previsto de finales de julio.
Es muy importante la instalación, en breve, de un sistema automático de medición de la calidad del agua que llega por la canal del Molino. También es interesante la nueva conducción que va directamente al estanque pequeño. Faltan la reconstrucción del vallado y la desgraciada pero necesaria instalación eléctrica que impida el paso de las nutrias, y la de los ladrones que se dedican a robar animales. Se entiende que el lamentable estado en que se encuentra la zona es pasajero, y se insta a que recupere la mejor de las imágenes.
Destacar, una vez más, lo imprescindible de proporcionar al parque las medidas de seguridad necesarias para evitar el vandalismo en todas sus formas.
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