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La periodista Edith Anderson (1915–1999), con la ropa sucia de grasa, aturdida por el cansancio y embriagada por sueños de justicia e igualdad, tira ... de la cuerda tensa de los asombros para que suene el largo aullido de la narración comprometida, las cuatro notas conmovedoras del tren que pasa veloz, con la máquina del vapor de la historia al frente. Es el tren de la lucha colectiva, el viejo tren de las reivindicaciones feministas, es el tren de los tres vagones literarios: el vagón que informa, el vagón que forma y el vagón que entretiene.

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elcomercio La lucha colectiva