El rector advierte a los jueces y al alcalde que el edificio de la Escuela de Minas «no les pertenece»

Es más, el rector no dudó en rebatir al presidente del TSJA, después de que este asegurara que alojar los juzgados en la Escuela de Minas era «la idea primigenia y el acuerdo primigenio que teníamos con la comunidad autónoma». «No entiendo –respondió Villaverde– dónde está ese acuerdo primigenio; me parece curioso que haya un acuerdo entre dos entes sobre un edificio que no es de su propiedad, porque debo recordar que los edificios de la Universidad son propiedad de la Universidad de Oviedo, no son propiedad del Principado ni de ninguna otra entidad, y es la Universidad de Oviedo la que decide sobre ellos».

Visiblemente molesto, advirtió que no es de su interés «contribuir a esa espiral de confusión que tanto gusta en esta región», pero no obvió el asunto y defendió la autonomía de la Universidad de Oviedo para convertir el edificio de la Escuela de Minas –ahora en obras tras el traslado de los estudios a Mieres en 2023– en un pabellón de gobierno de la institución académica. Una decisión, remarcó, que «no ha sido un capricho» y basada también «en la voluntad de contribuir a una solución» al problema de los juzgados en Oviedo.

Porque, explicó, este movimiento fue «provocado por la decisión que tomó el Gobierno, y nosotros le dimos la bienvenida, de desarrollar el campus del Cristo» a pesar de que «nuestra idea inicial no era esa». Es más, abundó, «nosotros entendimos que por responsabilidad institucional deberíamos formar parte de la solución a un problema que efectivamente existe desde hace 40 años –la dispersión de las sedes judiciales–, y que debíamos contribuir a ser una solución y no parte del problema, lo que nos obligó a tomar decisiones que recomponían el plan inicial con el edificio de la calle Independencia».

Dejado claro este asunto, volvió a pedir «respeto» para la institución y que «se deje de caricaturizar el destino que va a tener el edificio de Independencia», que concentrará, insistió, «todos los servicios centrales y los órganos de gobierno superiores de la Universidad y prestará servicio al conjunto de la comunidad universitaria asturiana, que son 25.000 personas». Un destino «que forma parte de unos planes de la Universidad en los que, además, queremos contribuir a buscar una solución al problema de justicia». «Pediría que no se tomen decisiones ni se hable con esa alegría de edificios que no les pertenecen», concluyó el rector.

Mientras Ignacio Villaverde pronunciaba estas palabras, el alcalde Alfredo Canteli, a preguntas de este diario, expuso su satisfacción ante la postura adoptada por el presidente del TSJA. «La idea de que los juzgados pudieran ir a la Escuela de Minas es mía, compartida con Jesús Chamorro. Me agrada mucho que haya admitido mi propuesta, que, en primer lugar, trasladé a Presidencia del Principado. Los tres estábamos en el tema. Yo llamé a Adrián para comentárselo», incidió, remarcando así la importancia de una propuesta compartida.

Sería, insistió el regidor, «la solución definitiva. Todo lo demás son parches para gastar dinero y tirarlo más adelante». Jesús Chamorro, abundó, «parece que estaría satisfecho yendo allí, manteniendo otras sedes en Oviedo. Quedaría el problema resuelto y a futuro, cuando llegue la Universidad, pues que vaya la Universidad a dónde tenga que ir y los despachos a dónde tengan que ir, pero en estos momentos hay que resolver el problema de los juzgados, que es urgente y si no lo hacemos así, estaremos siete u ocho años para hacerlo». Porque, a su juicio, «lo que sobran son despachos y lo que falta es resolver problemas de Oviedo y de Asturias, en este caso».