Los redactores del plan de El Cristo garantizan usos provisionales en el viejo HUCA

David Cortizo, uno de los arquitectos que integran la UTE ganadora del concurse de ideas, 'Hucamp: La campa de todos' lo resumió: «Nuestra obligación es fomentar actividad durante el desarrollo dando vida al barrio». Una actividad que, advirtió, no puede ir en contra del resultado final del planeamiento

El Ayuntamiento acaba de dar un pequeño paso en el proceso de tramitación de la modificación parcial del Plan General. Recientemente, ha contestado a las sugerencias planteadas por los vecinos y el Colegio de Arquitectos al documento inicial elaborados por los redactores del proyecto. Rechazando todas ellas. Pese a que Urbanismo desoye las recomendaciones del Colegio, que interesaba que los terrenos mantuvieran la titularidad pública para evitar la especulación, y también las de la plataforma SOS Viejo Hospital, que pretende generar cuanto antes actividad en la zona, el plan sigue adelante un año y medio después de que los arquitectos presentaran el documento inicial. Tanto desde la UTE responsable del planeamiento como desde el Principado reiteran que los usos provisionales están previstos en la hoja de ruta.

También desde el promotor de la actuación: fuentes del Principado de Asturias indicaron que el protocolo de colaboración firmado con el Ayuntamiento en 2016 «decía que con las partes de acuerdo se podían implantar anticipadamente usos y actividades, provisionales o definitivos, previa determinación de su viabilidad legal, técnica y económica, así como las fuentes de financiación de la actuación».

Un alivio para los vecinos que, aseguraron, no entendían cómo el Ayuntamiento negaba algo que ya se está dando en el parque del Truébano. «Un ejemplo de la lucha vecinal y de negociación con las administraciones», indicó Nacio González, quien advirtió que otra de sus propuestas, como es la instalación de una bolera, sigue esperando a la contestación del Principado.

Más allá del impulso que ha dado el Ayuntamiento casi un año después de la última reunión en la que todas las partes concernidas se pusieron de acuerdo para lanzar el proyecto sacando la plaza de toros del ámbito para una actuación en ella exclusivamente municipal, lo cierto es que la tramitación urbanística del plan para El Cristo-Buenavista es una historia de dilaciones. El documento inicial, ahora informado, estuvo casi un año parado desde 2018. Aprobado en el último Pleno del mandato anterior, hasta febrero de 2020 no hubo avances. Mientras tanto, el Principado dio paso al trámite ambiental que también fue contestado por vecinos y arquitectos. Cuando parecía que aceleraba, llegó la pandemia pero no solo, también se abrieron otros debates acerca del futuro de la actuación y el encaje de varias administraciones en el ordenamiento de la ciudad. La Universidad, que ocupa un papel central en el proyecto, y el TSJA lanzaron la idea de que este último ocupara el campus de Llamaquique para lograr, por su parte, la reunificación de las sedes judiciales.

El Principado calculaba que el pasado mayo iba a tener listo para su aprobación la revisión parcial en la zona, llegará a comienzos de 2021. A partir de ahí, se abre de nuevo el proceso de tramitación y aprobación definitiva y, en paralelo, de redacción del plan especial. Según los cálculos de los redactores, once meses mas. El proyecto suma las citadas viviendas -el 50% de protección-, un nuevo edificio para la Jefatura Superior de Policía o la reconversión de Maternidad para usos académicos.