El PSOE afronta la investidura de Barbón con el único apoyo de IU y desconfía de Podemos

El pleno para la elección del presidente del Principado arranca hoy con el socialista Adrián Barbón como único candidato, después de que la popular Teresa Mallada optase finalmente por no dar el paso. El secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) afronta su investidura con el único apoyo de IU, con quien ya ha firmado un «acuerdo inicial», ya que las conversaciones con Podemos a solo 24 horas de la primera votación parecen encalladas y resulta improbable que puedan desbloquearse.

PSOE y Podemos mantienen aún abiertas, al menos de cara a la galería, las negociaciones que permitirían al exalcalde de Laviana ser elegido nuevo jefe del Ejecutivo asturiano por mayoría absoluta mañana mismo. Ninguna de las partes reconoce que se haya tirado la toalla y todavía ayer a última hora de la tarde se intercambiaban documentos con diferentes propuestas cada vez más en detalle. Sin embargo, la desconfianza es mutua y la falta de entendimiento entre ambas partes hace complicado un acuerdo de última hora. Por ello, salvo sorpresa, la investidura de Barbón se retrasará al próximo lunes, en segunda votación, cuando resulta suficiente sumar mayoría simple.

El secretario general de Podemos, Daniel Ripa, aseguró ayer que la negociación está «muy verde» y, a última hora de la tarde, hizo entrega al partido ganador de las elecciones de cuatro documentos relativos al plan de reducción de listas de espera en sanidad, a la financiación de la universidad gratuita para el curso 2020-2021, al billete único a un euro en la zona central y al incremento del impuesto a grandes patrimonios para mejorar la atención a la dependencia.

La secretaria de Organización de la FSA, Gimena Llamedo, contraatacaba con nuevas propuestas en materia de educación infantil -aumentar a 5.478 las plazas- y relativas a la reducción del ratio por alumno -para disminuir el número de escolares por aula entre 20 y 25, según la etapa educativa- y hacía un llamamiento a la «responsabilidad». Los socialistas reprochan a Podemos que presenten propuestas «frívolas y brindis al sol» que les hacen dudar, en palabras de Llamedo, «de la voluntad» de la formación morada. «Es impropio de una formación seria el intento continuado por distorsionar el debate público con el afán único de acaparar un protagonismo que la ciudadanía no les concedió», reprochó.

Con quien sí hay un acuerdo en firme es con IU. Los diputados Ángela Vallina y Ovidio Zapico, arropados por una amplia representación de los alcaldes de la coalición, confirmaron su apoyo al candidato socialista con la firma de un acuerdo de investidura que, además de aspectos de índole social, recoge el compromiso de requerir al Gobierno central la aprobación del estatuto de las electrointensivas y nuevas infraestructuras, así como la promesa de buscar apoyos para la reforma del Estatuto de Autonomía para establecer la oficialidad de la llingua. Desde IU aseguraron que se trata de un primer acuerdo de carácter general que, confían, podrá concretarse a lo largo de la legislatura. Ángela Vallina aprovechó para presionar a Podemos y anotó que «sería muy torpe» que la izquierda en Asturias, que ha ganado las elecciones, «dificulte a un gobierno de izquierdas».

Por su parte, la portavoz del PP señaló ayer que la decisión de no optar a la investidura fue consensuada «con la dirección nacional del PP, alcaldes, portavoces y presidentes de juntas locales», sin citar la dirección autonómica que encabeza Mercedes Fernández, y anunció su intención de ejercer «una oposición constructiva y muy vigilante por el interés de los asturianos».