La jueza admite a trámite la querella contra Cascos y le cita a declarar el 23 de septiembre

El Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo acaba de admitir a trámite la querella interpuesta hace apenas unos días por los servicios jurídicos de Foro contra quien fuera el fundador de esta formación política, Francisco Álvarez-Cascos. La magistrada Simonet Quelle Coto, la misma que se ocupó de la instrucción del 'caso Villa' –que derivó en una condena de tres años de prisión por apropiación indebida, recurrida al Tribunal Supremo– se ocupará ahora de la instrucción de este nuevo presunto caso de apropiación indebida. El abogado de la formación política, Luis Llanes, del despacho Vaciero, destacaba ayer que se trata de un juzgado «con totales garantías» para este tipo de procesos, así como su agilidad en la tramitación en un momento en el que la administración de Justicia sufre importantes retrasos como consecuencia de la crisis sanitaria. La magistrada ha citado a Francisco Álvarez-Cascos a declarar a la vuelta del verano, el próximo 23 de septiembre.

La querella interpuesta por la actual dirección de Foro por un presunto delito de apropiación indebida y de administración desleal contra el exvicepresidente del Gobierno y expresidente del Principado se sustenta en una auditoría encargada por el equipo de Carmen Moriyón con la que se han detectado presuntas irregularidades cometidas en la etapa en la que Cascos dirigía el partido. De hecho, el texto remitido a los tribunales es un pormenorizado relato de todo tipo de cargos económicos al partido que, en opinión de los demandantes, exceden con mucho los límites de los gastos de representación. Más de un millón de euros en sueldos y dietas, 24.171 euros por los mítines previos a las elecciones de 2011 y gastos personales de todo tipo como licencias de pesca, hoteles, peajes, el teléfono de sus hijos, la facturación a través de una sociedad vinculada a su persona del alquiler de una «supuesta sede» del partido en Madrid o un préstamo personal son solo algunos de los epígrafes de una demanda que calcula que Cascos cobró más de un millón de euros entre 2012 y 2018 y que le costó otro más al partido por diferentes conceptos.