Premios Princesa de Asturias 2019 | El primer discurso del rey Felipe VI hace 38 años con «esperanza de futuro»

Muchas cosas han cambiado pero el próximo viernes 18 de octubre tendrá también muchas similitudes con aquel 3 de octubre de 1981. La ahora princesa de Asturias repetirá lo que hiciera su padre, ahora rey Felipe VI, a la misma edad, 13 años, en el mismo escenario, Teatro Campoamor, y con la misma expectativa de futuro, heredera al trono. Por ser, será también el primero en público.

El discurso del entonces príncipe Felipe duró un minuto y 24 segundos, escrito de su puño y letra a lo largo de cinco párrafos y que comenzaba resaltando que había querido que sus primeras palabras en público fueran en el Principado de Asturias, «cuyo título -dijo- con tanto honor ostento». Una lectura firme, pausada y segura, desde la mesa presidencial en la que le acompañaban don Juan Carlos y doña Sofía, sentados a su izquierda, y el entonces presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, a su derecha.

Fue más simbólico que elaborado, felicitaciones a los premiados y a los jurados encargados de conceder las distinciones así como la mención especial al momento político ya que la cita se producía meses después del golpe de Estado del 23-F. Sobre ello, Felipe VI destacó que la ceremonia albergaba «una gran esperanza de futuro». Tras otras palabras de apoyo a la Fundación Príncipe de Asturias, resaltó que la labor de esta institución había de tener una significación destacada y eficaz en beneficio de la región. «Esta Asturias querida -enfatizó- que llevo y llevaré siempre en lo más profundo de mi corazón».

Tan esperado como aplaudido. De hecho, prácticamente igualaron la duración la ovación como la lectura. Un minuto de aplauso cerrado y la sonrisa de satifacción de un padre con quien se cruzó un discreto gesto previo a tomar nuevamente asiento. Una ceremonia que pasará a la historia por ser una de las últimas con banderas españolas ilustradas con aquel escudo y águila acompañada por el yugo y las flechas. Por ley pasaría a la historia dos días después del acto del Campoamor.

A los 38 años de aquel instante, podrá volver a entonar el himno de Asturias. Lo hizo junto a su padre en aquella ocasión. Esta vez, junto a su hija.