Asturias guarda silencio «rota de dolor» en recuerdo de las víctimas de la pandemia

El presidente del Principado, Adrián Barbón, transmitió ayer el sentimiento colectivo del pueblo asturiano, «roto de dolor» por las víctimas del coronavirus. Lo hizo durante el acto que precedió a los cinco minutos de silencio convocados con motivo del inicio de las diez jornadas de luto que se celebrarán en todo el país para honrar la memoria de los fallecidos por la pandemia.

«Estamos aquí para testimoniar nuestro recuerdo a las víctimas del coronavirus, -casi 30.000 en toda España y 310 en Asturias-, y trasladar el afecto sincero a sus familiares y amigos», señaló el jefe del Ejecutivo instantes después de que se procediese a arriar las banderas, que ondearán a media asta durante los próximos días. Una señal de duelo, al igual que los crespones negros o los actos celebrados ayer en toda Asturias, que sirven para «expresar el sentimiento de dolor de todo un pueblo» y recordar a los fallecidos. Acompañado por el presidente de la Junta del Principado, la delegada del Gobierno en Asturias, el alcalde de Oviedo, la presidenta de la FACC y los portavoces de todos los grupos parlamentarios, Barbón instó de nuevo a los ciudadanos a «no bajar la guardia» frente al COVID».

Asimismo, avanzó la intención del Gobierno asturiano de «organizar cuando sea posible con asistencia ciudadana y de otras autoridades el acto de reconocimiento que merecen las víctimas. Queremos trabajar para dejar un recuerdo permanente», anunció, antes de concluir mostrando su «pesar sincero en nombre de Asturias por los fallecidos».

El celebrado ayer en el exterior de la sede de Presidencia fue el primero de una serie de minutos de silencio convocados en ayuntamientos, organismos y centros sanitarios de toda Asturias en señal de luto por los fallecidos y en los que también se instó a los ciudadanos a mantener todas las precauciones. «Debemos mantener la cautela» señaló tras el minuto de silencio en la Delegación del Gobierno la delegada en Asturias, Delia Losa, para evitar que aumenten las cifras de fallecidos, tras las que hay personas y familias rotas, recordó.

El consejero de Salud, Pablo Fernández, que participó en el acto de homenaje convocado en el hospital Monte Naranco, pidió también a los asturianos que continúen «atentos y vigilantes» para tratar de evitar nuevos brotes.

Los homenajes se sucedieron a lo largo de la mañana en las plazas de los ayuntamientos de las principales ciudades asturianas. «Es un día triste, pero este recuerdo era obligado», señaló el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli. En Gijón, donde el minuto de silencio se prolongó unos segundos más mientras sonaba el himno de Asturias en las campanas, su alcaldesa Ana González recordó las «muertes especialmente dolorosas» que ha provocado la pandemia. También en Cabueñes se guardó silencio. En Avilés, la corporación municipal y el personal del Hospital de San Agustín mostraron su dolor por las víctimas con silencio y aplausos.