Monedas de cinco pesetas que se cotizan por hasta 36.000 euros en el mercado
Así puedes identificar algunas de las piezas «fetiche» de la numismática española, ¿estará alguna olvidada en un cajón?
A. S. GONZÁLEZ
Jueves, 6 de octubre 2022, 02:45
Las nuevas generaciones quizás no conozcan de donde viene la popular expresión «no tiene un duro», frase comúnmente utilizada para describir la precaria situación económica de una persona. Las monedas de cinco pesetas tintinearon en los bolsillos de los españoles hasta que en 2002 la llegada del euro acabó con ellas.
A algunos la sustitución de divisa les pilló con el pie cambiado y nunca llegaron a cambiar sus ahorros. De hecho, un ciudadano gallego encontró recientemente 9 millones de pesetas en botes de Nesquik al adquirir una casa. Otros conservaros sus billetes y monedas como recuerdo; algunos, incluso, por despiste.
Según la estimación del Banco de España, en 2021 quedaban 1.586 millones de euros aún por canjear en nuestro país y el plazo definitivo expiró el 30 de junio del año pasado. Sea por un motivo o por otro, hay quienes conservan entre sus manos pequeños tesoros porque ciertas monedas se han revalorizado hasta cotizarse por miles de euros, multiplicando exponencialmente su valor.
Las 5 pesetas forjadas en el año 1949, conocidas como Duros de 1949, son «con toda probabilidad la moneda valiosa fetiche» del coleccionismo, según destaca el expertos numismático Javier Mercado, y su precio puede oscilar entre los 12.000 y 36.000 euros.
No en balde, la numismática española es la segunda más coleccionada en el mundo, sólo superada por la estadounidense, ya que, acuñadas desde 1869 hasta 2001, las monedas patrias fueron durante mucho tiempo divisa de cambio de ámbito mundial.
Existen 5 monedas diferentes de 5 pesetas de 1949 y no todas adquieren el mismo valor en el mercado. Los números troquelados en las dos estrellas que rodean la palabra *CINCO* con fundamentales.
Las más comunes contienen los números *19*49 y *19*50 y, si han permanecido desde entonces sin desgaste, ni arañazos, y con su color y brillo original, pueden venderse por entre 10 y 20 euros. Su valor es nulo si tienen señales de circulación, manchas o arañazos.
Los duros y la Guerra de Corea
Las piezas verdaderamente especiales son las conservan los números *19*51 y *19*52. En 1951, la guerra de Corea y al aumento del precio del níquel por su uso cada vez más habitual en la industria, llevó a que la producción de los duros superara su valor facial. Por ello, todas las monedas se fundieron menos unas pocas decenas.
La más especial es la de *52, de la que se conocen unos 14 ejemplares. Ha llegado a alcanzar un precio de 36.000€ en 2011, aunque lo habitual es que se cotice a 20.000 € frente a los tres mil o seis mil de las que contienen el *51.
Las pocas monedas fueron, ya en su día, guardadas por coleccionistas de la época con muy alto poder adquisitivo y por altas autoridades de la dictadura franquista por lo que es complicado que un ciudadano cualquier las encuentre olvidadas en un cajón.
El error que revaloriza los duros de 1975
El valor de los duros de 1957 depende del año troquelado en la estrella del reverso, ya que se emitieron ininterrumpidamente desde 1958 hasta 1975. Al ser muy comunes, el mínimo signo de circulación les priva de cualquier tipo de valor.
Los duros acuñados a partir de 1975 tampoco se valoran, a excepción de una tirada con error: una moneda que en el anverso presenta la fecha 1975, pero en el reverso presenta un motivo conmemorativo del mundial de fútbol celebrado en España en 1982. Los coleccionistas pagan por ellas entre 60 y 90 euros.
Los duros más antiguos, a pesar de lo que se puede presuponer, no son los más valorados. Fabricados en plata de ley .900 con un peso de 25 gramos, se acuñaron un total de 5.923.455 duros de plata de 1870.
Con marcas de desgaste, arañazos o golpecitos pero con todos los datos visibles y el número troquelado en las estrellas del anverso, pueden venderse por entre 15 y 20 euros. Si su estado excelente, alcanzan los 2.000 euros.