Mil pesetas más para paliar el descenso de la natalidad
Un aumento de mil pesetas de la prestación por cada hijo menor de 18 años: esa fue la medida anunciada por el Gobierno nacional a la entrada del año 2000, con el objetivo de paliar el descenso de la natalidad. Y en toda España, pero en ELCOMERCIO a quienes entrevistamos fue a gente de Gijón, no se acababa de ver clara la cuestión. «Me parece ridículo», nos decía Gumersindo González, jubilado a la sazón. «No me parece dinero», afirmaba, y el problema pasaba también por aplicar medidas sociales. En la misma línea se manifestaba la estudiante Llucía Fernández, que atinaba en el 'quid' de la cuestión: mil pesetas arriba o abajo, el problema era que «los jóvenes no tenemos perspectivas de encontrar trabajo estable y menos de poder adquirir una vivienda.¿Cómo nos vamos a plantear tener hijos?». Aún más taxativo era Fernando González, al que la medida le parecía «una tomadura de pelo». Faltaban medidas sociales, como «guarderías públicas o descuentos en la alimentación». De seguir así, «dentro de unos años no habrá mano de obra joven». De momento aguantamos, pero...