«Tiene un espíritu muy unificador, tenderá muchos puentes y será un gran viajero»

Dice Edgar Perales que Robert Prevost es una persona de «gran humanidad», muy pegado a la realidad y siempre preocupado por los más desfavorecidos. Perales tiene muchos recuerdos del nuevo Papa y numerosas vivencias, charlas e imágenes que lo atestiguan. Aunque en estos momentos está terminando su etapa como seminarista en Oviedo, tuvo mucho tiempo para compartir momentos y hasta recibir consejos de León XIV. «Lo conocí en 2014. Yo era seminarista en Chiclayo, mi lugar de origen, y él era el obispo de allí.Tengo muchos y muy buenos recuerdos de él». Edgar llegó a Oviedo en 2021, aquí se ordenará el 8 de junio en la Catedral de Oviedo. «El párroco de Olloniego es mi primo y surgió la posibilidad de concluir mi segunda etapa como seminarista, la Teología, en Asturias».

Perales, de 26 años, y que ingresó en el seminario a los 16, le pidió consejo a León XIV acerca de su traslado a Oviedo. «Es un hombre muy sabio y me dio muchos consejos en varios momentos de mi vida. Guardo especialmente dos de ellos: el primero, cuando ingresé en el seminario porque le confesé que tenía mucho miedo. Y él me dijo que tuviese presente siempre el don de la fidelidad». El segundo de los consejos que atesora es, precisamente, cuando se planteó venir a tierras asturianas. «Me recomendó entregarme a la Iglesia porque ésta se preocupa de las necesidades de las personas».

«Con una emoción desbordante» vivió el momento de la elección el pasado jueves. «Sentí una enorme alegría, lo conozco como un amigo y sé que es la persona indicada. Me impactó mucho saber que él era el elegido».

¿Cómo vio al nuevo Pontífice cuando hizo su aparición en el balcón? «Lo vi desbordado. Es una persona muy tímida. Creo que mientras salía hacia el balcón por su cabeza rondaban muchas ideas y la emoción se reflejó en sus ojos al ver a la multitud en la plaza». Describe al Pontífice como una persona «sensata, capaz de escuchar, inteligente, listo, alegre y entregado totalmente a los demás».De su etapa en Perú, Edgar dice que nunca dejó de ayudar a los más pobres, siempre se preocupó de la realidad de la gente; el pueblo peruano lo adora». Reconoce que ante él se abre un camino difícil, pero «tiene una gran vitalidad y creo que será muy viajero porque lo ha sido siempre.La juventud del nuevo Papa es un punto a favor para hacer muchas cosas. «Tiene un espíritu muy unificador, tenderá muchos puentes».

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