Secuestros y asesinatos: el crimen organizado de México persigue a la familia mormona LeBarón

Tres mujeres y seis menores de edad, todos pertenecientes a la familia LeBarón, aparecieron calcinados en un coche en el norte de México. Fueron el objetivo de un violento ataque que podría haber sido perpetrado por sicarios del crimen organizado, según informa el Gobierno mexicano.

Los LeBarón son una familia mormona de nacionalidad estadounidense y mexicana, conocida por denunciar públicamente las continuas olas de violencia que viven en el país. Esta es una de las hipótesis que se manejan como causa de los asesinatos.

«El saldo de la agresión son nueve fallecidos, tres mujeres y seis menores; hay seis menores lesionados, una menor ilesa y una menor presuntamente desaparecida», indico el secretario (ministro) de Seguridad, Alfonso Durazo, durante una rueda de prensa en la que también participó el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador.

El asalto se produjo en un camino rural entre los estados norteños de Sonora y Chihuahua, cuando un grupo armado emboscó a la familia que viajaba en un convoy conformado por tres mujeres y 14 menores repartidos en tres vehículos.

La zona en la que ocurrió el ataque es un área de disputa entre una célula relacionada con el Cártel de Pacífico y otros grupos. Por tanto, se especula con la posibilidad de que los sicarios confundiesen a la familia LeBarón con otas personas. «Hay que aclarar si los mataron sin saber quiénes eran o si fue un ataque directo», matizó López Obrador, ya que la familia viajaba en tres rancheras Chevrolet Suburban por una zona rural cuando fueron asaltados, por lo que existe la posibilidad de que fueran confundidos con miembros de otro cártel.

Sin embargo, permanece la hipótesis de que los criminales podrían tener alguna motivación de atacarles porque las víctimas son miembros de la familia LeBarón, una conocida comunidad de mormones asentada en México desde hace varias décadas. Los LeBarón han sufrido en el pasado secuestros y asesinatos de sus miembros por parte las organizaciones criminales, situación que han combatido enfrentándose a las bandas de narcotraficantes locales y denunciando públicamente los elevados niveles de violencia que sufre el país centroamericano desde hace años.

La familia LeBarón es una comunidad de mormones que llegó a México en 1942. Desde entonces, sus miembros se han dedicado a la producción de nueces en su granja ubicada en Galeana, un municipio ubicado a pocos kilómetros de la frontera con Estados Unidos dentro del norteño estado de Chihuahua.

Desgraciadamente, el asesinato de nueve de sus miembros a manos de un grupo armado es el último episodio de una larga lista de agresiones que han sufrido los Lebarón por parte del crimen organizado. En 2009, el apellido LeBarón se hizo conocido en todo México tras el secuestro de Erick LeBarón, entonces de 17 años. Un grupo criminal exigió a la familia un 1 millón de dólares, sin embargo, los LeBarón iniciaron una dura campaña mediática y lograron la liberación de Erick sin pagar un centavo.

Pero en julio de ese año, Benjamín LeBarón y Luis Widmar Stubss —otro miembro de la comunidad— fueron asesinados por un grupo criminal debido a su activismo contra la violencia. Desde entonces Julián LeBarón, uno de los integrantes de la familia, se convirtió en un conocido activista e inició un movimiento para denunciar la inseguridad que sufre México.