El Sporting de Gijón le dice adiós a Cote, su último Hijo Predilecto

Será un partido de despedidas. Y de protestas. El Molinón abrirá esta tarde sus puertas por última vez en una temporada tremendamente irregular marcada por el cambio de entrenador y por la lucha del Sporting por no perder la categoría. El sportinguismo, en cualquier caso, acudirá a la cita. Una vez más volverá a estar al lado de su equipo, pero esta vez lo hará además para despedir a uno de los futbolistas más grandes que ha dado la cantera. Porque José Ángel 'Cote' Valdés se vestirá por última vez en su carrera profesional la elástica del Sporting en El Molinón. Su casa, la que le vio nacer y crecer, le rendirá un sonoro homenaje en el enfrentamiento ante el Cartagena.

No hay adiós que no sea triste, pero este será especial. 'Cote' decidió colgar las botas al final de la presente temporada y la de esta tarde será su última cita en Gijón. El choque, intrascendente porque el Sporting logró la permanencia matemática la pasada semana, se jugará en las gradas del estadio gijonés.

Es el turno del sportinguismo. Y, por lo visto en los últimos días, la afición está decidida a jugar su partido. Primero, para aplaudir a Cote y agradecerle su defensa intachable del escudo y la camiseta. Pero también mostrará su enfado a los dirigentes por la gestión que están llevando a cabo desde que aterrizaron en Gijón, con la salvedad de la pasada campaña.

Garitano ya anunció el viernes que Cote será titular. Jugará en el lateral izquierdo junto a diez compañeros más. El entrenador no quiere relajaciones porque «nos jugamos estar lo más arriba posible en la clasificación». Es decir, quiere terminar el curso de la mejor manera posible para que la imagen se enturbie lo menos posible y el aficionado no termine con un peor sabor de boca.

La de Cote no será, a priori, la única despedida de la tarde. Pese a que Asier Garitano asegurara que «no me atrevería a decir que será también el último partido en El Molinón de Nacho Méndez, Gelabert Lander Olaetxea», todo hace indicar que será así. Los tres casos son muy diferentes.

El centrocampista vasco parece tener un principio de acuerdo con el Eibar, equipo al que llegará libre después de cumplir su único año de contrato que firmó con el Sporting. En cuanto a Gelabert, la dirección deportiva está haciendo lo posible para que pueda continuar una campaña más como rojiblanco. Su futuro es incierto, al igual que su despedida, ya que podría volver a vestir de rojiblanco. Y, en el caso de Nacho Méndez, el canterano no ha renovado su compromiso y no parece que lo vaya a hacer. Su mira está en Primera División y el Alavés ya ha preguntado por su situación.

Pase lo que pase con el futuro de estos tres futbolistas, lo que es incuestionable es que la plantilla sufrirá una nueva revolución para intentar no sufrir tanto como se ha hecho esta campaña. Pensar en que el Sporting se puede reforzar para luchar por el ascenso suena a quimera.

El choque también servirá, al igual que el de la próxima semana ante el Racing de Ferrol, para que los menos habituales muestren su candidatura a formar parte de la próxima plantilla que formará la dirección deportiva junto a Asier Garitano.

El propio entrenador destacó hace unos días que «los que menos han jugado tendrán que demostrar que quieren estar en el Sporting». Un mensaje claro sobre todo para los canteranos como Nacho Martín, Queipo y Gaspar Campos. Este último ya dejó detalles de su mejor versión en el último enfrentamiento en El Molinón ante el Deportivo de La Coruña. Una de las pocas buenas noticias de las últimas semanas.

El partido es lo menos trascendente de la tarde, pero ganar siempre dejará un poso de felicidad al sportinguismo. Clasificatoriamente para el club es importante por motivos económicos. Pero poco más.

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