La recuperación de la crisis en Asturias será más lenta
El Principado tardará más que la media nacional en salir de la recesión aunque el repunte del acero redundará en toda la industria
E. ARENAS
Domingo, 29 de diciembre 2013, 10:31
Tras más de cinco años de crisis y de recesión económica -con la excepción de 2011, en el que el PIB creció un exiguo 0,1%- España parece afrontar al fin un año en el que se vislumbran más luces que sombras. Instituciones, organismos y servicios de estudios nacionales e internacionales apuntan en sus previsiones hacia la recuperación efectiva de la economía en 2014.
Un panel de expertos de reconocido prestigio consultados por EL COMERCIO coinciden en esa misma línea y, si bien advierten de que el año no estará exento de riesgos, se muestran en mayor o menor medida optimistas sobre el futuro a 365 días vista. Eso sí, el paro seguirá siendo la gran asignatura pendiente y aunque puede experimentar una leve reducción en la segunda mitad del año, no será muy significativa. Para Asturias, auguran una recuperación aún más «lenta y frágil» que en el resto del país, aunque confían en que la buena evolución de las industrias básicas y el acero y la capacidad exportadora de las empresas ayuden a impulsar la recuperación.
Joaquín Trigo Director general del Instituto de Estudios Económicos
«Como el cielo o el infierno»
O«El próximo año será un poco mejor que este, no mucho, pero ya 2013 ha sido mejor que el anterior y la diferencia entre caer o subir un poco, en esta situación, es como el infierno o el cielo. Las empresas han aprendido un poco a trabajar sin dinero exterior porque la banca no ayuda y eso también tiene su parte positiva. El sector público ha reducido mucho sus entes, aunque no tanto como debiera, y junto con otras actuaciones puede ayudar a que muchas empresas tengan menos costes y empleen menos tiempo en sus gestiones. También estamos empezando a tener un país más homogéneo en cuanto a las diferentes legislaciones autonómicas y eso agiliza la economía».
«A pesar de las dificultades que hay en el resto de la UE, 2014 será el año de la salida definitiva de la crisis. Aunque hay riesgos, pero son básicamente externos. Es decir, que nos compren menos porque Francia y Alemania está yendo un poco hacia atrás y eso se puede notar, y el resto de países mediterráneos, como Italia, están muy flojos. También nos podemos hacer daño nosotros mismos si no seguimos controlando el gasto público, y si el precio que pagamos por el dinero vuelve a subir perderemos el alivio que tenemos ahora».
«En cuanto al empleo, creo que podemos empezar a crearlo aunque no estemos creciendo mucho, porque las empresas pueden ya no tener tanto miedo a contratar al no tener que pagar tan elevadas indemnizaciones por despido».
Ángel de la Fuente Economista e investigador del Instituto de Análisis Económico del CSIC
«Habrá que seguir apretándose el cinturón»
O«Antes de pensar en 2014, tocaría madera. Creo que hemos tocado fondo y que poco a poco deberíamos ir saliendo de la crisis, pero, también, que la recuperación va a ser frágil, lenta y poco intensa. Nos enfrentamos a algunos riesgos externos, porque dependemos de que los países de Europa y Estados Unidos, a los que fundamentalmente vendemos nuestros productos, evolucionen de forma positiva y no sufran nuevas recaídas. En 2014 seguiremos siendo pobres y habrá que seguir apretándose el cinturón. Es cierto que no habrá grandes recortes y que los que se produzcan serán más suaves que los de los años precedentes, pero tampoco muchas alegrías. Seguimos en emergencia presupuestaria».
«En cuanto al empleo, no soy muy optimista. Aunque, es cierto que, con la simplificación de contratos y la mejora del empleo a tiempo parcial, se puede conseguir que haya más gente trabajando aunque durante menos horas. Pese a todo, que dejemos de destruir empleo ya es un dato importante. Aunque, en el corto plazo, no veo mejoras sustanciales, el hecho de que la economía haya dejado de caer ya debe ser motivo de alegría. Es el primer paso de una recuperación que en Asturias será todavía más lenta y frágil que en el resto del país, pero que, con un poco de suerte, también empezaremos a notar el próximo año».
Emilio Ontiveros Presidente de Analistas Financieros Internacionales
«Recuperación, pero tibia, dependiente e insuficiente»
O«Vamos hacia una recuperación económica tibia, dependiente e insuficiente. Tibia porque es difícil que la economía crezca más del 1%. Dependiente porque está muy sometida a lo que ocurra en el entorno europeo y si las economías de la Eurozona no crecen lo suficiente, la española pude permanecer en una fase de bajo crecimiento durante muchos años. Además, el entorno regulador bancario europeo no favorece la estabilidad financiera, la transición a la unión bancaria no está siendo suficientemente bien clarificada y eso no es bueno para el conjunto de la Eurozona. Y será una recuperación insuficiente porque crecer por debajo del 1,5% no reduce los dos principales desequilibrios que tenemos, el desempleo y la solvencia financiera de empresas y familias, que siguen manteniendo niveles de endeudamiento ciertamente elevados».
«El certificado de defunción de la recesión es un hecho, pero crecer por debajo del 1,5% no va a ser suficiente para que familias y pymes perciban claramente que la crisis ha quedado atrás».
Joaquín Lorences Catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Oviedo
«Ya sería una gran noticia que dejáramos de caer»
O«Todo apunta a que 2014 será el año de la recuperación, pero no debemos olvidar que hemos caído muchísimo y que no vamos a recuperar el empleo y la producción que se perdieron desde el año 2008. Ya sería una gran noticia que dejáramos de caer y que empezáramos a crecer. Esperemos, eso sí, que Asturias se recupere al mismo ritmo que el resto del país y no se quede atrás como sucedió en otras ocasiones. Creemos que puede ser así ya que las industrias asturianas son de bienes intermedios y los clientes han vaciado sus stocks por lo que, en el momento en que se produzca una recuperación, realizarán los pedidos de forma inmediata».
«Sobre el empleo también se ha reducido muy intensamente y hemos perdido mucho. Pero, con el incremento de producción, la creación de empleo no puede tardar mucho en llegar. Otro problema va a ser el de la banca, que todavía no ha soltado el grifo. Sigue encontrando oportunidades mejores que los préstamos y aún no ve negocio en el crédito».
Santiago Carbó Catedrático de Economía de la Bangor University británica e investigador de Funcas
«El año de la confirmación del punto de inflexión»
O«Será el año en el que se tiene que confirmar el punto de inflexión que se ha comenzado a emprender. El PIB puede ofrecer sorpresas positivas y buena parte de los analistas y el propio Gobierno pienso que lo revisarán al alza. Sería deseable que el consumo acompañara al buen comportamiento del sector exterior, algo que parece que ya se comienza a observar, aunque tímidamente. Y la inversión también podría dejar atrás los titubeos y ofrecer una tendencia al alza más marcada de lo que hemos visto hasta ahora».
«También se puede crear algo de empleo, pero esta parte de la transición va a ser más lenta y complicada. El punto de partida, con un 26% de paro, es una losa muy grande, pero lo importante es que se genere un ritmo de creación de empleo más o menos constante. En lugar de abaratar más el despido, tal vez sea más efectivo simplificar contratos y emprender políticas de reciclaje y, en general, de formación activa bastante más eficaces de las que se han puesto en marcha hasta ahora».
Manuel González Díaz Decano de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Oviedo
«Las empresas asturianas lo están haciendo bien»
O«Es evidente que va a haber una mejoría durante 2014, pero lo difícil es conocer cómo se va a producir y en qué se va a traducir. La dinámica de la comunidad es la de salir más despacio de las crisis, pero creemos que no debería de ser una recuperación muy lenta. Las empresas lo están haciendo bien, la gente busca empleo con fuerza y la demanda se va a notar más. Buena parte de nuestra economía se basa en la industria básica y el acero está con mucha actividad lo que redundará en el resto de la industria. De todas formas hay que ser cautos y observar cómo van a ir las cifras a lo largo del año. La capacidad de exportación de las empresas asturianas, que demostraron gran actividad durante la crisis, también va a ser un punto importante para la recuperación».
Miguel Cardoso Economista jefe para España del BBVA Research
«El crecimiento del empleo podría anticiparse»
O«El crecimiento que ya se ha iniciado continuará hasta el 1% del PIB el año que viene. Las exportaciones, con un entorno positivo por la recuperación del principal destino, que es Europa, deberían beneficiar sobre todo a las autonomías que tiene una fuerte dependencia de Francia y Alemania. También vemos una mejor posición de familias y empresas, de incremento en sus ahorros que en un entorno de menor incertidumbre se deberían trasladar hacia una mayor inversión. Asimismo, el sector público, donde ha habido esfuerzos muy potentes, ya no va a restar tanto del crecimiento. Para lograr reducir el déficit en 2012 el Gobierno tuvo que implementar medidas por valor de entre el 4,5 y el 5% del PIB; este 2013, las medidas han supuesto alrededor de dos puntos del PIB; mientras que para 2014 sólo serán necesarias medidas por un punto de PIB, lo cual creemos que se dejará notar en la demanda interna».
«También vemos signos positivos en el empleo y su crecimiento podría anticiparse a lo que pensábamos por los efectos de la reforma laboral, ya que ahora la economía puede ser capaz de crear empleo con niveles más bajos de crecimiento del PIB».
«De todas formas, la recuperación económica será lenta porque aún estamos absorbiendo el exceso del mercado inmobiliario. Y en el exterior, es clave que Europa continúe avanzando hacia una mejora de la institucionalidad y especialmente hacia la unión bancaria. Si esto descarrila podría afectar de manera importante a las perspectivas de crecimiento».
Sara de la Rica Cated rática de Economía y directora de la cátedra FEDEA del Banco de España
«Aumento de la contratación tenue y de forma precaria»
O«Claramente se presenta algo mejor que 2013 y que 2012, que fue nefasto. Se ve algo de luz en términos de reactivación económica. Sectores tractores de nuestra economía parecen comenzar a percibir estímulos notables en la demanda de sus productos y éste es el primer paso tangible de la reactivación. También se percibe en los últimos dos meses un repunte en el comercio minorista, lo que parece apuntar hacia una mejora en las perspectivas de los consumidores, pieza clave para que el consumo y en consecuencia la demanda también comience a cambiar de signo. Confío en que en 2014 veremos por fin un cambio de tendencia suave hacia la recuperación».
«La del empleo llegará tras el repunte de la demanda, pero me temo que el aumento en la contratación será tenue, y sobre todo se utilizarán mecanismos de contratación precarios, como ha sucedido hasta ahora. Esta es una de nuestras tareas pendientes. Otra es que no todos los trabajadores tendrán las mismas oportunidades de empleo. Algunos necesitan ayudas para la adaptación al mercado, como los parados de larga duración, cuyo capital humano está totalmente depreciado tras tanto tiempo en el desempleo».
«Deberíamos aprovechar esta crisis para aprender de nuestras deficiencias en el modelo de relaciones laborales. Ser capaces de percibir los enormes costes económicos y sociales de la precariedad laboral, de la carencia de relaciones fluidas entre los agentes sociales que facilitan acuerdos y agilizan la adaptación a los cambios, y de la imperiosa necesidad de que las políticas activas funcionen 'activando' a los trabajadores que pierden su empleo».
Ramón Adell Vicepresidente de la Confederación Española de Directivos y catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona
«Puede que el año depare sorpresas agradables»
O«Será un año de leve crecimiento pero posiblemente con alguna sorpresa agradable en la medida en que puede ser algo superior al que apuntan las previsiones. De las crisis de deuda como esta se puede salir de tres formas: con quitas, con inflación o con crecimiento. Las quitas no parecen previsibles y la inflación la controla a rajatabla el BCE, así que sólo queda el crecimiento, que será más o menos rápido en función de que Alemania relaje o no su política de austeridad. En la medida en que podamos aprovecharnos de esa relajación también podremos dar un impulso al crecimiento por encima de las previsiones. La gran asignatura pendiente seguirá siendo el empleo. Hasta que el crecimiento no sea significativo, del 1,5-2%, y de forma continuada durante una serie de años no se podrán generar puestos de trabajo suficientes».
«Por otra parte, el mayor riesgo para la economía somos nosotros mismos, porque aún estamos al comienzo de una situación de mejora en la que queda muchísimo por hacer y debemos evitar caer en la autocomplacencia al ver que ya estamos algo mejor».
R afael Pampillón Profesor del IE Business School y catedrático de l a Universidad San Pablo CEU
«Podemos ir hacia un crecimiento del 1,5%»
O«La situación mejorará sensiblemente y aunque la mayoría de los analistas vaticinan un crecimiento del PIB de alrededor del 1%, yo iría más bien hacia un 1,5%. Se ha dejado de destruir empleo, el consumo se anima, la bajada del precio de la vivienda ha empezado a parar después de reducirse casi un 40%, también parece que se ha dejado de corregir la caída del poder adquisitivo de los trabajadores, y la inversión en bienes de equipo y las exportaciones siguen tirando».
«Soy muy optimista para el año que viene. Será el año de la recuperación. Se han hecho ajustes muy duros en el mercado laboral, en el mercado de la vivienda, con menos éxito en el sector público, pero creo que se van corrigiendo los desequilibrios y aunque de forma dura y austera hemos sentado las bases para un crecimiento económico sostenido y de empleo futuro duradero a largo plazo».
«En cuanto a los riesgos, no son tantos: el precio de las materias primas, la subida de los tipos de interés en EE UU y un menor crecimiento en los países emergentes. E internamente, el riesgo de la complacencia, de que después de haber hecho las cosas relativamente bien, el Gobierno se relaje porque el año que viene hay elecciones europeas y el siguiente municipales y autonómicas, y después las generales».
Luis Caramés Presidente de la Organización de Economistas de la Educación y catedrático de la Universidad gallega de Santiago
«Si Alemania se permitiese una ligera subida salarial, ayudaría bastante»
O«Hemos salido técnicamente de la recesión, pero el crecimiento basado sólo en la demanda externa -que se ha dinamizado mucho a consecuencia, entre otras cosas, de la devaluación interna salarial- no es suficiente para alcanzar una adecuada velocidad de crucero. A mi juicio, la 'bomba' se cebaría, y no sólo en España, sino en el conjunto del sur de Europa, si Alemania dejase crecer un poco sus precios, es decir, se permitiese una ligera subida salarial. Eso ayudaría bastante a terminar de superar esta crisis. En este sentido, resta saber, aunque parece que las cosas van a seguir de momento igual, si la recientemente formada coalición de gobierno con los socialdemócratas hace cambiar la postura tan rígida que hasta ahora a mantenido la canciller germana, Angela Merkel».