Pacientes del Valle del Nalón estrenan la monitorización con Inteligencia Artificial

Este mecanismo se instaló por primera vez en Europa el pasado mes en el hospital de referencia del área sanitaria VIII, la correspondiente a la zona del Nalón. El 'holter' integra una Inteligencia Artificial con algoritmos avanzados e información del paciente para detectar arritmias y otras anomalías cardiacas, como síncopes cardiológicos, fibrilación auricular o descenso de la frecuencia cardiaca (bradiarritmias), que no son fáciles de registrar porque no se presentan de una manera constante.

Hasta el momento, se han instalado cuatro dispositivos que permiten más de seis años de monitorización inteligente; incluye la detección de cambios de posición y postura del cuerpo durante los episodios; seguimiento de la frecuencia cardíaca elevada con y sin actividad; el uso de un algoritmo de detección de latidos extra del corazón que se adelantan al ritmo cariaco (extrasístoles); y la ayuda para la detección de la fibrilación auricular, y programación remota de todos los parámetros.

Al ser un dispositivo subcutáneo, que se instala con una intervención muy sencilla de cirugía menor, mediante una incisión de un centímetro, los pacientes experimentan mayor comodidad en comparación con los 'holters' tradicionales, mucho más grandes e incómodos, con lo que se mejora su adherencia al tratamiento y seguimiento.

La medición de los resultados a lo largo de los seis años, al tratarse del 'holter' con tecnología 'bluetooth' más duradero del mercado, se puede hacer a través de un teléfono móvil, descargando una aplicación específica, o con un transmisor que se conecta mediante un sistema inalámbrico. Estos datos son fundamentales para conseguir un diagnóstico más certero de las afecciones cardíacas y mejorar la calidad de los tratamientos.

La detección temprana de irregularidades cardíacas presenta ventajas para los pacientes y para el Servicio de Salud, ya que reduce las hospitalizaciones.

La buena cooperación entre los cardiólogos que implantan el aparato y los técnicos de la unidad de corazón del hospital que se encargan de su mantenimiento ha sido una de las claves por las que la multinacional que comercializa los 'holters' se haya decantado por el Nalón para iniciar su uso en Europa».