Los vecinos de Las Regueras, Candamo y Grado alertan de robos en sus zonas rurales

Motosierras, guadañas, martillos, hachas o cualquier tipo de herramienta, elementos que están siendo sustraídos de casetas de aperos, cuadras, garajes e incluso de viviendas en la amplia zona rural de Grado, Las Regueras y de Candamo, según los testimonios de varios afectados.

Los amigos de lo ajeno perpetran sus robos en zonas donde la seguridad es normalmente mínima al tratarse de edificaciones ubicadas en huertas o campos, donde los vecinos guardan herramientas para utilizar «en chapuzas o reparaciones pequeñas», y, principalmente, «en las tierras». Los vecinos creen que «deben estar vigilando y, cuando nos vamos de la huerta, entran y roban lo que pueden».

Los robos, según apreciaciones de los afectados, se producen al anochecer o de madrugada sin que los propietarios se den cuenta de ello. Creen que podría tratarse de personas que no viven en estos núcleos rurales y que se acercan a ellos «para robarnos lo poco que tenemos en las huertas».

Explican que, en ocasiones, además de robar, «nos rompen la puerta o una ventana, causando daños innecesarios», porque lo sustraído «no suele ser un gran botín, pero el disgusto y los daños no nos los quita nadie. Además, ya te queda el miedo de que puedan volver a hacerlo», apostillan los afectados.

Los propios vecinos aseguran que dichas sustracciones llevan produciéndose «desde hace varias semanas», de forma intermitente, y confirman que se están produciendo en zonas rurales de los municipios de Las Regueras, Grado y Candamo. «Creemos que van de un lado a otro haciendo daño, porque con lo que se llevan no se van a volver ricos, pero a nosotros son cosas que utilizamos a diario». Su mayor temor es que estos robos puedan comenzar a producirse también en las viviendas.

Algunos de los afectados explican que «están entrando a garajes y casetas de aperos y llevándose herramientas y maquinaria, generalmente pequeña, que tememos puedan vender por cuatro duros». Por lo cual, los propios vecinos reclaman colaboración. Así, apuntan que si por estas zonas rurales «veis gente o coches extraños, coged matrícula o haced foto y, cualquier sospecha, comunicadlo a la Guardia Civil, al 062». Además, recuerdan la importancia de «ir a la policía para dejar constancia si te falta algo o entraron en tu propiedad, para que así tengan más datos y poder localizarlos». «Aunque sea poco y de poco valor, hay que denunciar», apostillan.

Con ello intentan evitar nuevos robos. Apostillan los vecinos que, al mismo tiempo, son conscientes de que «los agentes no pueden estar en todos los sitios porque son muy pocos y es una zona rural amplia».

Si bien, al mismo tiempo, reclaman que «no estaría mal que se patrullase más por estas zonas, por lo menos ahora que saben de estos robos», por las que dicen que la vigilancia policial de forma habitual es «escasa».

Los robos en casas de aperos y viviendas en la zona rural no son algo nuevo en Las Regueras y Grado, donde en 2017 las fuerzas de seguridad detuvieron a dos personas por delitos similares a los que ahora denuncian los vecinos de estos tres concejos.

• Temas
• Candamo
• Grado