Adrián Barbón agita la pugna Vox–PP para dividir a la oposición en Asturias

La «puya», habitual por otra parte, de la portavoz de Vox al PP fue recogida al vuelo por el dirigente socialista. En su turno de respuesta aseguró no querer meterse en «el romance» entre ambas formaciones ni en su «discusión por el electorado», pero acto seguido deslizó que, según las encuestas, Vox «le está comiendo terreno al PP, y eso sí que es preocupante». Y añadió: «Lo digo públicamente, lo dije más veces en este parlamento: yo, a los votantes que estén dudando entre PP y Vox, prefiero mil veces que voten al PP. Ustedes (en referencia a Vox) son una anomalía democrática».

No se quedó ahí. En su cara a cara con la diputada del Grupo Mixto, Covadonga Tomé (ex de Podemos y ahora líder de Somos), volvió a sacar el tema. Tras agradecer el tono constructivo de la parlamentaria, reprochó que «ni la derecha ni la extrema derecha» hubieran planteado propuestas concretas para la prevención de incendios. «Están en una batalla por el voto rural entre ellos y yo todavía no tengo muy claro si va a ganar la señora López o el señor Venta Cueli. Ahí hay batalla. Confío en usted, señor Venta», ironizó Barbón.

La gestión forestal centró buena parte del primer cara a cara del presidente del Principado con los portavoces parlamentarios tras el receso veraniego. La portavoz de Vox acusó al Gobierno regional de “abandonar el medio rural” y de “preferir la propaganda en las tareas de extinción antes que la prevención”. “Cada hectárea quemada es una prueba de su fracaso y cada ganadero arruinado una prueba de su desprecio al medio rural”, lanzó la dirigente de la formación.

Barbón no sólo defendió la actuación de su Ejecutivo, sino que aseguró contar con el respaldo vecinal. “Lo sé porque estuve en contacto con mucha gente”, replicó el presidente, que se comprometió a seguir apoyando a la ganadería extensiva, “la mejor garantía para proteger el medio”, y a reforzar los servicios de emergencia.

Recordó además su propuesta —asumida por el presidente del Gobierno central— de llevar la prevención de incendios a la próxima Conferencia de Presidencias, que se celebrará en Asturias. Y también su intención de coordinarse con las comunidades vecinas para mejorar la respuesta conjunta ante fuegos que puedan afectar a varias regiones.

En materia preventiva, explicó que está previsto reforzar recursos y centrar los esfuerzos en la protección de los pueblos. Además, se comprometió a incorporar a los próximos presupuestos varias de las propuestas de la diputada Covadonga Tomé, cuyo voto será decisivo para aprobar las cuentas. La parlamentaria planteó, entre otras medidas, delimitar claramente las zonas aptas para el pastoreo, facilitar que los ayuntamientos puedan ejecutar las partidas de prevención, crear mesas locales de gestión del territorio, devolver montes en mano común, incentivar técnicas adecuadas de gestión forestal y reforzar la vigilancia mediante la monitorización de áreas sensibles.

Las críticas de la oposición no se centraron únicamente en materia forestal. El PP llevó al pleno de la Junta General el debate sobre la quita de la deuda, reprochando al Gobierno regional que su aceptación “perjudica” a Asturias. “Sánchez ordena, usted obedece y Asturias paga”, le recriminó a Adrián Barbón el presidente popular, Álvaro Queipo, en su cara a cara. Queipo acusó al jefe del Ejecutivo de “traicionar” el acuerdo parlamentario alcanzado en la pasada legislatura sobre financiación autonómica y de “mentir” a los ciudadanos. “¿Cuándo va a decirles a los asturianos que aceptar la quita de la deuda catalana no va a darnos ni un solo euro más para educación, sanidad o servicios sociales?”, cuestionó, poniendo sobre la mesa las dudas planteadas por la Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) acerca de si la regla de gasto limitará el uso de los 30 millones de euros anuales de intereses que el Principado dejaría de pagar si saliera adelante esta medida.

El presidente autonómico evitó responder a esa cuestión concreta y defendió que la quita es “beneficiosa” para Asturias porque permitirá aminorar en 1.508 millones el pasivo de la comunidad. Incluso lo comparó con que a un asturiano con 100.000 euros de hipoteca le perdonasen 40.000, una afirmación que generó un fuerte malestar en la bancada popular, que recuerda que la deuda "no se evapora, se reparte".

El enfrentamiento entre ambos subió de tono cuando Queipo reprochó a Barbón su “falta de respeto con los símbolos de Asturias” por no asistir a la Misa de Covadonga y también por “crear muros artificiales entre asturianos” y alentar “algaradas contra deportistas extranjeros”, en referencia a sus críticas por la participación de Israel en la Vuelta Ciclista. “No todo vale para desviar la atención”, le dijo. “El poder le ha cambiado o, mejor dicho, el miedo a perder el poder le ha cambiado”, censuró el líder del PP, quien entiende que nada queda del Adrián Barbón que "presumía de moderación”.

El presidente asturiano replicó que no aceptará lecciones de moderación de “aquel que es incapaz de condenar el asesinato de 20.000 niños en Gaza o del que defiende a su maestro político que ha dicho cavar fosas en una comunidad como Asturias que por desgracia sabe bien lo que significa”, en referencia a las palabras del secretario general del PP, Miguel Tellado, sobre cavar la fosa del Gobierno central. Y, frente a las críticas por su ausencia en Covadonga, recuperó un documento de la Junta General de octubre de 1983 del que se desprende que Alianza Popular era contrario a mantener el 8 de septiembre, día de la Virgen de Covadonga, como Día de Asturias.