Asturias y Galicia piden que la UE las considere zonas escasamente pobladas, como a Teruel

Paradójicamente, dos regiones que organizan una cumbre en torno al reto demográfico no son consideradas por la Unión Europea dentro de las zonas escasamente pobladas (recordó Barbón que sólo tienen tal consideración en España «Teruel, Cuenca y Soria»), una figura que habilita más ayudas y con menor cofinanciación de la propia comunidad para las iniciativas que favorezcan la repoblación y el emprendimiento. Por ello, Rueda y Barbón indicaron que pedirán al Gobierno central que negocie con la UE que sus regiones entren en esa figura legal, en consideración a la dispersión de la población y a su alto nivel de sobreenvejecimiento. De hecho, uno de los acuerdos adoptados en la reunión de ayer fue el de crear un grupo de trabajo conjunto entre la Administración gallega y la asturiana «para compartir y evaluar la eficiencia de las medidas que para afrontar el reto demográfico se están tomando en ambos territorios», con el objetivo de optimizar los esfuerzos y mejorar la aplicación en las cinco provincias.

Porque se trataba en esencia de evaluar las medidas adoptadas a ambos lados de la Ría del Eo para hacer frente al reto demográfico, y en este sentido Adrián Barbón concedió que Galicia va un paso por delante en la lucha contra el despoblamiento y el envejecimiento de la región. Una lucha que Alfonso Rueda definió como «transversal», porque no se trata solo de habilitar ayudas a la natalidad, sino «afrontando cómo tener una sanidad de primer nivel, infraestructuras que vertebren la región y todos sus territorios, cómo tener una financiación autonómica justa para nuestros territorios o, por ejemplo, cómo se reforman las pensiones. Es una cuestión que trasciende los colores políticos y que no puede ser de políticas de quita y pon, sino de planteamientos duraderos, de futuro y que no dependan de qué color político gobierne».

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Ambos presidentes hicieron ver que en lo básico las medidas que se han puesto ya en marcha en ambas regiones son esencialmente las mismas, si bien el gallego anotó que el 0/3 es gratuito para el 100% de las familias (en Asturias es para el 75%) con un coste anual de 55 millones de euros, o que hay ayudas de 3.000 euros para la crianza de hijos que en Galicia «benefician a 100.000 hogares y al 80% de las familias». Pero en cuanto al reto demográfico, lo principal fue ayer hablar de la adaptación a Asturias del Plan Retorna, que ya está en marcha en Galicia y que, como explicó Rueda, en su primera fase ha supuesto ya el retorno de «28.000 gallegos de origen» del extranjero a la región vecina, que sufre también, como Asturias, pero en menor proporción respecto a su población total, el mordisco del decrecimiento vegetativo.

En Galicia, región que roza los 2,7 millones de habitantes, nacen cada año 13.000 personas menos que las que fallecen. En Asturias, con un millón casi exacto, el decremento vegetativo es de 9.000.¿Qué ha hecho Galicia para lograr ese retorno de 28.000 personas en la primera fase del Plan Retorna? Pues «darles una ayuda para solventar el problema de la vivienda en los primeros meses, además de darles ya en origen un asesoramiento sobre los trámites para la vuelta y también asesorarles para el emprendimiento empresarial, y facilitar la escolarización de sus hijos. Pero más allá de eso, hay una iniciativa muy claramente destinada a lo que en Asturias hemos dado en llamar 'retorno del talento'. Los gallegos están ayudando «a estudiantes que ya han acabado su formación universitaria con ayudas para vivir en Galicia durante un año de máster, en el que se van a formar. Hemos constatado que entre el 75% y el 80% de los que hacen ese máster se quedan en Galicia y con contrato», una iniciativa extensible «a aquellos que se formaron en Galicia y que se fueron al extranjero a buscar trabajo». Con ese año de máster subvencionado trabaja Galicia por el retorno del talento.

Y en la segunda fase, que comenzará ahora, «vamos a mejorar todo eso, con el objetivo de ir a los lugares de origen, formarles allí y que vengan a Galicia ya con contrato de trabajo». Esa importación de profesionales, formados y en edad de emprender tanto una vida laboral como la creación de una familia, se sitúa como un objetivo que Barbón dijo que se adaptará a la realidad de Asturias, una región en la que la colonia en el extranjero es mucho menor que la gallega, pero que aún así tiene 138.207 asturianos fuera de las fronteras de España.