El Gobierno estudiará llevar el tren a la ZALIA, pero rechaza las vías del AVE entre Lena y Gijón

Los planes del Ministerio de Transportes para la red viaria de la región se concretan y también los de la ferroviaria. La medida más costosa de cuantas se maduran es la variante de Villabona. En julio encargó la redacción del estudio informativo de «una variante de trazado en la actual red ferroviaria de ancho ibérico, desde Lugo de Llanera hasta el entorno de Serín, que permita la mejora de los tiempos de viaje entre Oviedo y Gijón».

A petición del Principado, el ministerio va a ampliar un poco ese ámbito geográfico. El estudio llegará hasta «el futuro emplazamiento de ZALIA y se tendrá en cuenta la compatibilidad con la posible conexión ferroviaria de dicha instalación», indican desde Transportes.

Lo que no hará el ministerio es aprovechar para ir instalando vías de ancho mixto (también denominado 'triple hilo'). Sobre estas vías pueden circular tanto trenes en ancho ibérico (como son los cercanías, el Alvia y las mercancías actuales) como en ancho internacional (como es el caso del AVE y de las mercancías en el resto de la Unión Europea).

La instalación de este tipo de vía entre Lena y Gijón es algo que el Principado tiene incluido en su Plan de Infraestructuras, con lo que trabaja El Musel en sus previsiones de futuro, y que vienen reivindicando en los últimos tiempos la patronal Fade y la Plataforma Tecnológica Túneles de Pajares. En el ministerio responden que en la variante de Villabona «no se considera al no existir conexión con ninguna línea de ancho estándar», también denominado ancho internacional.

«Sobre la línea Lena-Gijón, la prioridad del Gobierno, fijada de acuerdo con el Ejecutivo de Asturias, es completar y poner en servicio la variante de Pajares y comenzar los servicios de alta velocidad en Asturias y, simultáneamente, avanzar en la mejora de los servicios de cercanías», argumentan en Transportes.

«El ancho de vía no tiene ninguna relación ni con los tiempos de viaje ni con la catalogación de la línea como alta velocidad. Es una cuestión técnica de explotación ferroviaria que algunos quieren convertir en tema político», expone el ministerio.