Salud estudia la aparición en el área sanitaria de Avilés de varios casos de 'fiebre Q'
Esta «rareza epidemiológica», que se manifiesta inicialmente con síntomas gripales, se propaga por medio de animales domésticos
MIRIAM SUÁREZ
GIJÓN.
Viernes, 1 de abril 2022, 01:32
A la covid-19 y a la gripe A, que irrumpió con fuerza en Asturias a principios del mes de marzo, se suma ahora otra infección respiratoria, conocida como 'fiebre Q'. Una «rareza epidemiológica», según médicos del Servicio de Salud del Principado (Sespa), de la que se han dado varios casos en la última semana, principalmente en el área sanitaria III, con epicentro en el Hospital San Agustín de Avilés.
Los pacientes afectados ingresaron con neumonía, que las pruebas diagnósticas practicadas por los médicos atribuyeron a una manifestación aguda de 'fiebre Q'. Esta enfermedad infecciosa, desencadenada por una bacteria intracelular que recibe el nombre científico de 'Coxiella burnetii', se propaga por medio de animales domésticos, como vacas, ovejas o cabras. También las garrapatas transmiten este bacilo «peculiar», que encuentra su caldo de cultivo en el ámbito rural «y no es muy común».
La 'fiebre Q' puede contraerse bebiendo leche cruda -sin pasteurizar- o después de inhalar el polvo de una cuadra donde, por ejemplo, haya orina o heces de un animal contaminado. Lo habitual es que se presente como un síndrome gripal, con sintomatología leve. Pero en su fase aguda, esta enfermedad se caracteriza por fiebre alta, dolor de cabeza, fatiga, escalofríos, dolor de garganta, tos no productiva, sudoración, nauseas, vómitos, diarrea y dolor torácico. Proceso que puede derivar en una neumonía «atípica».
Los profesionales sanitarios del Hospital San Agustín, donde se han detectado los casos más llamativos de 'fiebre Q', hacen ahora seguimiento a estos pacientes para «averiguar si se trata de un brote puntual o de algo de lo que debemos preocuparnos». Este hallazgo médico coincide con un «ligero repunte» de la covid-19 y un incremento notable del virus de la gripe (en su tipología A), que empieza a tener su repercusión en los hospitales. «Aumentan los ingresos por gripe, especialmente en personas mayores de 75 años, mientras seguimos mirando de reojo la evolución de la pandemia», apuntan fuentes hospitalarias.
