Organizaciones católicas llevan a la 'Santina queer' a los tribunales

La polémica por la 'Santina queer' ha saltado de las redes sociales a los tribunales. La Hermandad de Los Estudiantes ha interpuesto una denuncia ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) por un posible delito de odio contra los organizadores y convocantes de la manifestación por el 8M en Gijón. Este colectivo no es el único que considera que la reinterpretación de la Virgen de Covadonga, patrona de Asturias, supone una ofensa contra los sentimientos religiosos. Abogados Cristianos ha comunicado que también «actuará en los tribunales contra esta ofensa». «Una vez más, el feminismo radical utiliza el 8 de marzo para atacar a los cristianos», ha dicho la fundación que preside Polonia Castellanos en un post en redes sociales acompañado de una foto realizada por EL COMERCIO.

«La utilización de la Virgen de Covadonga conlleva odio, hostilidad, desprecio, discriminación o violencia contra un grupo concreto como son los católicos, especialmente en Asturias», valora la Hernandad de Los Estudiantes. El colectivo considera, además, que la puesta en escena —las 'costaleras', miembros de un colectivo trans, iban ataviadas con pasamontañas rosa chillón y bajo palio durante todo el recorrido— sugiere «inequívocamente» la imagen de un paso de Semana Santa con «leyendas sacrílegas o cuando menos muy irrespetuosas» y una «apariencia claramente burlesca». Critican también la utilización de la expresión católica «Virgen de Covadonga, ella nos guía» distorsionando su propósito original y adaptándola a «los espúreos intereses de los organizadores de la manifestación».

La Hermandad de Los Estudiantes consideran que la libertad de expresión no puede «justificar toda clase de conductas por más que éstas atenten contra símbolos y creencias de un grupo religioso». Además, sostienen que el objetivo de la manifestación era defender a la mujer trabajadora, «cuestión radicalmente alejada de insultar, menoscabar, humillar, menospreciar o desacreditar a símbolos de una religión, como de hecho ha sucedido».

La prueba «evidente» de que la 'Santina queer' humilla y menosprecia el sentimiento religioso son las «abundantísimas quejas y reacciones que provocó en un grupo como es el de los católicos en España». Lo cierto es que la Santina 'queer', engalanada con manto morado, corona y flores, removió sensibilidades dentro y fuera del universo digital, generando posiciones enfrentadas –y mucho– entre quienes aplaudían la idea y quienes la consideraban una falta de respeto a los sentimientos religiosos.

La crítica más contundente provino de Vox, cuya portavoz en el Ayuntamiento de Gijón, Sara Álvarez Rouco, cargó contra «estas falsas feministas, que arrastraron miserablemente la dignidad de las mujeres por las calles de Gijón» durante la manifestación del 8M. La también diputada autonómica calificó como «parodia vergonzosa» la imagen 'queer' de la Santina, que es una puerta abierta al fundamentalismo feminazi. La discriminación que practican y el odio que profesan es un desafío para la sociedad que mantiene con sus impuestos a estas radicales».

La Tertulia Feminista Les Comadres ha denunciado la agresión a una manifestante por parte de «dos transactivistas» durante la marcha que congregó el pasado 8 de marzo a más de 9.000 personas en Gijón. «Lo condenamos como hacemos siempre que una mujer es agredida por manifestarse pública y pacíficamente. No lo vamos a consentir. No permitiremos que nos silencien en aras de intereses ajenos a la causa feminista», han reivindicado.

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