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La manifestación del 8M revolucionó la cuaresma con una procesión muy alejada de los cánones establecidos por la tradición católica, y cuyas 'costaleras', ataviadas con pasamontañas rosa chillón, portaron bajo palio durante todo el recorrido a la 'Santina de Queervadonga'. Esta reinterpretación de la patrona de Asturias, obra de un colectivo transfeminista, desató la polémica en cuestión de minutos.
«Contra el fascismo, ella nos guía», rezaba la leyenda de esta particular recreación de un paso de Semana Santa con base arcoiris, que incendió las redes sociales y acabó convirtiéndose en lo más sonado de la manifestación que ayer concentró en Gijón a miles de personas. La Santina 'queer', engalanada con manto morado, corona y flores, removió sensibilidades dentro y fuera del universo digital, generando posiciones enfrentadas –y mucho– entre quienes aplaudían la idea y quienes la consideraban una falta de respeto a los sentimientos religiosos.
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La crítica más contundente provino de Vox, cuya portavoz en el Ayuntamiento de Gijón, Sara Álvarez Rouco, cargó contra «estas falsas feministas, que arrastraron miserablemente la dignidad de las mujeres por las calles de Gijón» durante la manifestación del 8M. La también diputada autonómica calificó como «parodia vergonzosa» la imagen 'queer' de la Santina, que es una puerta abierta al fundamentalismo feminazi. La discriminación que practican y el odio que profesan es un desafío para la sociedad que mantiene con sus impuestos a estas radicales».
El término 'queer' abarca las identidades de género y orientaciones sexuales diferentes a las heterosexuales y cisgénero. Históricamente se utilizaba en términos despectivos, pero hoy en día es utilizado de forma positiva por personas LGBTQ+ para expresar una identidad flexible y no binaria, que habla de personas sin identificarlas por su sexualidad o género. «Se aprovechan de su posición ventajista con el gobierno socialcomunista de Barbón, que tan creyente se confiesa, para atropellar las creencias religiosas de los asturianos», recriminó Sara Álvarez Rouco.
Mientras Vox instaba abiertamente a «no quedarnos inmóviles ante tanta ofensa premeditada», el concejal de Tráfico de Foro, Pelayo Barcia, dejaba constancia de su rechazo a este paso procesional tan disruptor con un escueto mensaje en redes sociales: «Pedir respeto, faltándolo». Entretanto, AMA Asturies, colectivo que inspiró la procesión 'queer' del 8M, centraba su mensaje en que «aquí tamos un añu más, llenando les calles de Xixón, demostrando que contra el fascismo, el feminismu ye la solución». Y colectivos como el sindicato CC.OO. se alinearon con la 'Santina de Queervadonga' declarando «así ye, ella nos guía».
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