Las asociaciones piden mejoras: «Es complicado andar en silla de ruedas por Avilés»

La Plataforma por los Servicios Públicos de Avilés y Comarca que coordina el doctor Laureano Rivas organizó en el Palacio de Valdecarzana una interesante y completa mesa redonda para hablar de la movilidad en la comarca avilesina en la que participaron el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Avilés, Pelayo García; Alejandro Alonso, cabeza visible de la Asociación Rey Pelayo; y Mercedes Vieites, tesorera de Difac.

Laureano Rivas fue el encargado de realizar la introducción, poniendo sobre la mesa los temas a tratar posteriormente y sobre todo incentivando a los presentes, con la sala prácticamente llena, a intervenir en el debate posterior, algo que caló. La primera ponente en intervenir fue Mercedes Vieites, enfermera de profesión a quien una operación de médula dejó en una silla de ruedas en 1989. Natural de Ribadeo, lleva dos años viviendo en Avilés, lo que le ha permitido comprobar que «es una ciudad en la que es complicado moverse en silla de ruedas».

«Aceras con baldosas sueltas, desniveles por culpa de raíces o alcantarillas, el empedrado del casco histórico –aunque entendemos que es lógico–... Urge mejorar este tipo de cosas, aunque reconocemos que a lo largo de los 30 años que cumple Difac ha habido muchos avances y percibimos sensibilidad en los cuatro ayuntamientos de la comarca», comentó Vieites.

La también coordinadora del Área de la Infancia de la Asociación recordó que «es necesario realizar el mantenimiento de las zonas en las que se han eliminado barreras» y denunció que «los taxis adaptados, además de ser pocos –tres en Avilés y uno en Corvera–, cobran más de lo habitual y eso no es legal». Sin embargo, en el debate posterior no le vio remedio, pues «si pides la factura y denuncias, a ver quién te vuelve a recoger después...».

Por alusiones, que fueron muchas, Pelayo García echó mano de datos y una oratoria impoluta para defender varias de las actuaciones del Ayuntamiento a nivel de movilidad y accesibilidad, sin escurrir el bulto. En ese sentido, reconoció la problemática de los taxis, explicando que «desde el Ayuntamiento les hemos exigido por escrito cumplir con la normativa, recordándoles las ayudas que tuvieron y tienen para adaptar el taxi y mantenerlo. También hicimos convocatorias para ampliar el número, pero por ahora no se ha conseguido».

Alejandro Alonso, de la Asociación Rey Pelayo, hizo mucho hincapié en la brecha digital. «De los 75 chavales que tenemos con nosotros, 70 no son capaces de realizar trámites administrativos por internet. Y los otros cinco con ayuda. Estamos deshumanizando los servicios y eso afecta también a las personas mayores. La brecha digital es enorme y debemos darle una vuelta, recuperar las citas presenciales».

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