Avilés
«El antroxu en Llaranes es como una forma de vida»Último día para visitar la exposición de la Sardina Arenque sobre fotografías y carteles de la peña carnavalera
Rosa Fuentes
AVILÉS.
Viernes, 20 de diciembre 2024, 08:44
Los planes de estos días tienen un sabor a Navidad que apenas deja tiempo para más actividad. Sin embargo, en Llaranes (Avilés) se ... apunta más lejos. La cofradía de la Sardina Arenque ha preparado una exposición que celebra los cuarenta años del antroxu en el barrio y que se podrá visitar hasta hoy, en el centro socio cultural.
Se podría decir que lo llevan en las venas. Son la peña más antigua de Avilés y han dedicado muchas horas a organizar esta muestra que recoge fotografías, vestuario y cantidad ingente de material que se ha ido utilizando a los largo de estos años. Se trata de una deuda pendiente que Ángel García Bartolomé, actual Sardino Mayor tenía con el fallecido José Ángel del Río Gondell, artífice de esta fiesta, en 1983, un año antes del primer desfile.
El archivo fotográfico contiene más de 1.500 imágenes. Entre todas, la selección se ha hecho por décadas y tiene «un carácter muy emotivo porque se ven personas que ya no están». También se exponen carteles, disfraces y los utensilios que han ido guardando de desfiles. Toda una recopilación que comenzaron en el mes de julio.
Ángel García está muy orgulloso. «Aquí, en Llaranes, es donde empieza el Antroxu avilesino, porque siempre cerramos el del año anterior dando medallas a la gente antroxera de pro».
No tienen problemas de relevo generacional. Cuentan con doce adultos y muchos niños que disfrutan desde los tres años porque «hay que aleccionarlos para que vayan cogiendo maneras», porque «el antroxu es una forma de vida, con toda la irreverencia a la satírica y todo lo que representa en sí el carnaval».
Tiene 32 años y lleva 20 en la agrupación. «Para mí esto es todo». Reconoce que tuvo la gran suerte de que José del Río hubiera confiado en mí para seguir con el testigo, y me pidió que hiciera esta exposición si él no estaba, y seguir así los pasos de la gente que plantó la semilla, el mejor del norte, cueste lo que cueste porque fue lo que hicieron ellos conmigo y quiero seguir transmitiéndolo a las generaciones futuras».
El rostro de Ángel García se vuelve pícaro y sonriente al pensar en el Antroxu 2025 porque, como no podía ser menos «ya estamos tramando algo». Asegura que se le ocurren «muchas cosas que pueden dar idea de que estoy chiflado, pero los que tengo alrededor están peor que yo y todavía matizan y llevan las ideas más allá, es de locos».
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