El juicio contra el confitero Julio Pardo por asesinar a su mujer será en enero

El propietario de la confitería La Duquesita, Julio Pardo, será jugado por el asesinato de su esposa casi dos años después de los hechos. La Sección Tercera de la Audiencia Provincial ha señalado el juicio contra él para los días 8, 9, 10 y 12 de enero de 2018. Tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares solicitan para 25 años de prisión por unos hechos que ocurrieron en el domicilio familiar de la calle Ramón y Cajal, en El Carbayedo, en enero del año pasado.

Según mantiene la Fiscalía, el conocido confitero habría matado a su mujer en la madrugada del 26 de enero de 2016 golpeándola en reiteradas ocasiones en la cabeza y en la cara con una llave inglesa mientras dormía en el lecho conyugal. El cadáver fue hallado en torno a las dos de la tarde del día siguiente cuando la policía irrumpió en el domicilio alertada por la familia, que no tenía noticias de Ascensión Amores Porcel y veía la confitería cerrada. A él lo encontraron en el salón con síntomas de haber ingerido fármacos y fue inmediatamente detenido.

Concretamente, el crimen se habría materializado en torno a las cuatro de la madrugada, unas cinco horas después de que ambos regresasen de cenar en un restaurante del centro histórico de Avilés. El cadáver no se descubriría hasta unas 34 horas después, en torno a las dos de la tarde del día 27.

Julio Pardo fue detenido inmediatamente por la Policía Nacional cuando se encontró el cadáver de su mujer en la habitación del domicilio, en un primer momento fue trasladado al Hospital San Agustín, ya que estaba sentado en el salón de la vivienda y presentaba síntomas de haber consumido alcohol y fármacos; y después al HUCA, desde donde ingresó en la cárcel de Villabona. Allí permanece desde entonces.

Según la calificación del Ministerio Fiscal, esa noche el confitero «se dirigió al dormitorio conyugal, y encontrándose Ascensión Amores Porcel dormida, sin mediar palabra, de forma súbita e inesperada, le propinó, con una llave inglesa, numerosos golpes en la cabeza, dejándola inconsciente. Aprovechando esta situación de aturdimiento, que eliminaba cualquier posibilidad de defensa de la mujer, el acusado continuó golpeándola reiteradamente, fundamentalmente en la cara, provocándole un politraumatismo craneoencefálico severo que determinó su fallecimiento». Por eso califica los hechos como constitutivos de un delito de asesinato con las agravantes de desprecio de género y parentesco y, además de la máxima pena de cárcel, que son 25 años, por para el delito de asesinato, solicita que, una vez salga de prisión, Julio Pardo quede en libertad vigilada por un período de diez años, con obligación de estar siempre localizable mediante aparatos electrónicos y de comunicar cualquier cambio de domicilio o lugar de residencia y la prohibición de residir en Asturias.

También reclamará en el juicio que se celebrará en enero el pago de cuantiosas indemnizaciones a los familiares de Ascensión Amores: 100.000 euros para cada uno de los progenitores de la víctima y 50.000 para cada uno de sus cinco hermanos. En total, 450.000 euros.

Las acusaciones particulares formadas por la familia y la asociación Abogadas por la Igualdad también reclamarán en el juicio que se celebrará el próximo mes de enero la máxima pena para Julio Pardo.

La Fiscalía apunta como posible móvil de este crimen que estremeció a la sociedad avilesina motivos económicos derivados de la marcha del negocio familiar, en el que también trabajaba la difunta, y tensiones familiares. Ascensión Amores tenía 46 años y llevaba casada con Julio Pardo desde el 10 de mayo de 2008.