El 'rey de copas' da el salto a la élite del Supercampeonato

A sus veintiséis años, el tevergano ha alcanzado el sueño que busca todo piloto, un volante oficial, que le ha llegado de la mano de Hyundai España como premio tras inscribir la temporada pasada su nombre como el primer ganador de la Hyundai i20 N Cup, la monomarca que lanzó la marca coreana en España.

«Estoy muy contento y muy ilusionado. Es el sueño de cualquier piloto», confiesa Álvarez, quien antes de recibir el apoyo definitivo de la marca tuvo que desplazarse a finales de enero a Portugal, junto a su copiloto, el llanisco Diego Álvarez Sustacha, para realizar un test con la que será ahora su nueva montura, el Hyundai i20N Rally2 de la estructura lusa Sports&You, la misma que se encarga de gestionar el Citroën C3 Rally2 de Diego Ruiloba y Ángel Vela.

Precisamente Vela fue compañero del tevergano durante tres temporadas, logrando junto al riosellano el subcampeonato de la Clio Trophy Spain 2020 y la tercera posición en el VolanFAPA de 2019, el año de la victoria de Alejandro Cachón, firmando un triplete del equipo Alvemaco, con Adrián García segundo.

Y es que Pepe Álvarez es un piloto 'copero', que ha vinculado su trayectoria en los rallys a las copas monomarcas, esas que permiten competir con costes contenidos y cuyos premios por prueba ayudan a completar los siempre ajustados presupuestos, siendo el tevergano uno de sus mayores exponentes.

En 2018 estrenó su palmarés con la consecución de la Dacia Sandero Cup a nivel nacional, a la cual siguió en 2022 la Copa Suzuki Swift, en su última edición, y de la cual le quedó un sabor amargo, ya que un fuerte accidente en la última cita de la temporada, el RallyRacc Catalunya, le mantuvo alejado de los rallys durante más de medio año.

Su trabajo meticuloso y una filosofía de piloto de antaño, como la de su padre Félix, habitual de las copas de promoción en la década de los 90 y principios de 2000, le han llevado al premio de ponerse al volante del i20N Rally2 Step 2, inicialmente por tres pruebas, aunque el programa podría extenderse según su evolución.

«Se presenta una temporada de aprendizaje, en la que tendremos que ir evolucionando poco a poco, cada kilómetro, e intentar demostrar de lo que podemos ser capaces», apunta Álvarez, quien tiene claro cuál será su planteamiento: «El objetivo es que cada metro que hagamos con el coche demos un paso adelante».