La Audiencia Nacional da la razón a Arcelor y avala la prórroga del ERTE para este año

La sentencia, del pasado 8 de mayo y contra la que cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo, declara justificada la decisión patronal impugnada y absuelve a la multinacional siderúrgica de todos los pedimentos de la demanda al considerar que no concurren los motivos alegados para declarar la nulidad ni su declaración de no ajustada a derecho. Además, respecto a las supuesta falta de información durante el período de negociación, la Audiencia Nacional no aprecia una posición «inmovilista» de la empresa y considera que «no fue la empresa la que mostró una posición opuesta a la voluntad de alcanzar un acuerdo, más al contrario, fueron las representaciones sindicales las que desde el inicio, se mostraron disconformes con la posibilidad de alcanzar aquel». «Ante la cerrada posición sindical, nada hubiera aportado alargar el periodo de consultas más allá del previsto», recoge la sentencia.

La Audiencia Nacional considera acreditadas las causas organizativas y productivas alegadas por Arcelor y permite a la empresa continuar con la aplicación el ERTE hasta el 31 de diciembre en los mismos porcentajes y garantías que en la actualidad. Una vez pasada esa fecha, si Arcelor quiere seguir utilizando ese mecanismo en la plantilla, deberá iniciarse una nueva negociación, un escenario que los sindicatos no descartan. «Dado el desinterés demostrado por la dirección en acometer las inversiones inicialmente comprometidas en materia de descarbonización, mucho nos tememos que la utilización de los ERTE vaya a tener carácter permanente, máxime cuando está prevista la finalización de la vida útil del horno alto 'A' o incluso su parada por decisión empresarial este mismo año y que podría derivar incluso en un futuro ERE de extinción a gran escala», advirtieron ayer desde CC OO de Industria en Asturias. Desde el sindicato mostraron respeto hacia la sentencia: «A diferencia de la dirección, no criticamos las decisiones judiciales, aun cuando como en este caso no se han atendido las alegaciones presentadas».

Los tres sindicatos –posteriormente se unió ELA– interpusieron la demanda el pasado 25 de enero con el objetivo de que se declarase la terminación por caducidad del ERTE y, en consecuencia, la nulidad de la decisión de prórroga desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2024; se declarase la nulidad del citado procedimiento por vulneración del principio de buena fe negocial, o subsidiariamente, para el caso de no estimarse ninguna de las dos peticiones anteriores, se declarase injustificada o improcedente la decisión empresarial.