Capital Energy intenta vender su cartera de renovables

La empresa, liderada por Jesús Martín Buezas, quiere dar un giro de timón y subirse al tren de otro negocio que se augura prometedor, aunque ya hay quien habla también de burbuja, como con las renovables: el de los centros de datos. Igualmente, ante el recorte de personal realizado se han disparado todas las alarmas.

Capital Energy se convirtió en uno de los actores más relevantes del sector al calor del 'boom' de las renovables, con proyectos en toda España. Dentro de su ambicioso plan de energías limpias, consideraba Asturias, donde abrió oficina, «una región clave» y cuantificaba que el desarrollo de su cartera en la comunidad podía generar más de 6.500 empleos durante la construcción y alrededor de 230 en fase de operación. Además, cifraba los potenciales ingresos para las arcas del Principado y sus municipios en más de 40 millones de euros en el momento del montaje, y más de seis anuales una vez puestos en marcha los proyectos.

El grupo incluso se postuló para ser de los primeros desarrolladores de un parque eólico marino en la costa del Principado y planteaba participar en iniciativas de hidrógeno verde. Sin embargo, de todo aquello, tras chocar con la burocracia y la oposición de distintos colectivos, solo se ha ejecutado el parque de Buseco, con una capacidad instalada de 50 MW, y con la peculiaridad de ser de alta montaña, lo que obligó a un complicado despliegue logístico para su montaje. Hace un tiempo lo vendió a Verbund Green Power.

Tras el fracaso para salir a Bolsa y algunos intentos de venta, Capital Energy ha contratado a Evercore para encontrar comprador a esa cartera de renovables. Se trata así de otra de las empresas que busca desinvertir en un sector que ha visto desplomarse el precio de las licencias en apenas un año y en el que muchos de los proyectos van a acabar en un cajón ante la caída de la rentabilidad.