Las recolocaciones de Zumárraga en Asturias se harán a costa de eventuales

Era un secreto a voces, pero que hasta ahora ArcelorMittal se había negado a reconocer. Los trabajadores de la planta de Zumárraga que recalen en Gijón y Avilés lo harán a costa de los eventuales de las factorías asturianas, ya que la multinacional no está dispuesta a incrementar la plantilla. Así lo confirmaron ayer a este periódico fuentes del grupo que, no obstante, aseguran que es prematuro cuantificar el impacto, dado que los empleados vascos tienen hasta hoy para decidir si optan por el traslado al Principado o por desligarse del gigante siderúrgico. El efecto, sin embargo, se verá reducido porque la mayoría de trabajadores guipuzcoanos elegirá salir de la empresa. A cambio, la compañía les ha ofrecido indemnizaciones de 45 días por año trabajado con tope de 42 mensualidades hasta 2012, y 33 días desde febrero de ese ejercicio.

Fuentes sindicales reconocen también que serán una minoría los que opten por las recolocaciones. Hasta el miércoles por la noche solo 25 habían aceptado el traslado, mientras que 100 ya habían anunciado a la compañía su intención de abandonar el grupo. El resto, casi dos centenares, aún no se había pronunciado.

Una de las consecuencias de la llegada de los trabajadores vascos al Principado reconocida por la compañía es que eventuales que tenían la opción de incorporarse en el contrato relevo no podrán hacerlo. Esta medida no será, precisamente, bien acogida en Asturias. Durante los últimos meses los comités de empresa de las factorías de Gijón y Avilés han advertido de que exigirán el cumplimiento de los compromisos firmados en enero en el último acuerdo marco, que pasan por la incorporación de cien eventuales al año y la salida de 900 trabajadores a través de contratos relevo hasta 2020, entre otros. En Arcelor, por su parte, reconocen que tendrán que hablar con los representantes de los trabajadores con los que no han querido mantener contactos para tratar el tema de la llegada de los operarios vascos hasta no saber la cifra concreta de empleados que optan por el traslado.

Las recolocaciones irán acompañadas por un plan social para facilitar la transición, una ayuda al traslado y otra para paliar la pérdida económica que supondrá el cambio, ya que los sueldos de Zumárraga son mayores que los de Asturias. Los trabajadores que se incorporen al Principado lo harán en las condiciones de los de aquí y con un contrato similar al que tenían en la acería vasca.

Por otro lado, el comité de empresa de ArcelorMittal Zumárraga ha anunciado que recurrirá a los tribunales para denunciar que la dirección no ha negociado «con buena fe» durante el periodo de consultas. Los representantes de los trabajadores consideran que la empresa ha conducido la negociación con el objetivo de «deshacerse de la mayor parte de la plantilla posible» a través de las bajas incentivadas, pero «no se ha hablado de las condiciones ni los puestos que serán cubiertos por los que acepten la reubicación en Asturias».