Arcelor plantea prorrogar el ERTE a su plantilla por una demanda débil que se mantiene en el tiempo
Los sindicatos liman asperezas, plantean una contrapropuesta conjunta sobre el convenio e instan a la empresa a cerrar la negociación
Arcelor no espera que la demanda de acero mejore «en el corto o medio plazo». El mercado sigue débil, especialmente en algunos productos, y ... con esa premisa planteó ayer a los sindicatos prorrogar el actual expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) para los trabajadores del Clúster Asturias, que incluye, además de las plantas de Gijón y Avilés, las de Lesaca (Navarra), Echévarri (Vizcaya) y Sagunto (Valencia). En el Principado implica a alrededor de 5.000 empleados, aunque esto no significa que todos sean regulados. Como máximo se pactó que afecte a un 15% de las horas de trabajo, siempre y cuando una instalación esté parada, muy por debajo del 25% propuesto inicialmente. Hoy mismo está prevista una primera reunión en Echévarri en la que la multinacional entregará a las organizaciones sindicales la documentación para empezar a negociar.
El actual ERTE se acordó a inicios de octubre y también se aplica en los centros de distribución del grupo y en AMDS Processing (el negocio dedicado a procesar productos planos al carbono en función de las necesidades de los clientes). Ya entonces Arcelor pidió que se extendiera durante seis meses, pero los sindicatos solo admitieron tres. Se niegan a ofrecer una carta blanca a la compañía, después de acusarla de emplear esta herramienta de flexibilidad laboral para lograr beneficios empresariales, no para hacer frente a paradas o reducciones necesarias de producción, y sobre todo, tras los ERTE impulsados unilateralmente por el grupo en plena pandemia. De ahí que las últimas negociaciones se hayan complicado. El bloqueo actual del convenio y de la salida del personal nacido en 1961 y 1962 tampoco ayudarán esta vez, aunque las condiciones sean muy benévolas con la plantilla: reciben una compensación de hasta el 90% del salario bruto y el 100% de las pagas extra y las vacaciones.
No obstante, los representantes sindicales son conscientes de que la capacidad productiva está mermada por un mercado que no acaba de remontar, otra cuestión es cómo se perciba la gravedad de la situación. En la actualidad, los hornos altos trabajan a alrededor del 70%. La incidencia de esa reducción es muy distinta según los distintos acabados. Alambrón, explican fuentes sindicales, es de los talleres más afectados, con la reducción de cinco a tres turnos e incluso paradas de más de diez días al mes. En hojalata la situación no es mucho mejor. Su producción no despega tras meses de crisis.
Ante esta situación, sindicatos como UGT o USO se muestran más abiertos a prorrogar el ERTE para dar cobertura a los trabajadores de las instalaciones afectadas por la caída de la demanda y los efectos de la entrada de acero extracomunitario. Desde CC OO, sin embargo, ya se mostraron ayer muy reacios a firmar si antes no hay un acuerdo del convenio.
Porque tanto esa negociación, como la de la mesa de empleo, que tiene que ver con la salida del personal de más edad y el ajuste de personal ligado a las inversiones, están enrareciendo también los contactos con la empresa y entre los propios sindicatos. Se trata de temas que, en principio, son independientes, pero todo está íntimamente relacionado. Así, CC OO no prorrogará el ERTE si no hay convenio y UGT y USO ligan este a un acuerdo sobre el empleo.
Mejoras
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