Maroto se compromete ante Barbón a aprobar en un mes el estatuto de las electrointensivas

Si uno atiende a lo avanzado el miércoles por el secretario general de Industria, Raül Blanco, y afinado ayer por la titular del ministerio, Reyes Maroto, antes de la primavera el estatuto de electrointensivas debería de estar encima de la mesa. «Estamos esperando los informes preceptivos, hablamos de una horquilla en torno a un mes», respondió la ministra a preguntas de EL COMERCIO acerca de los plazos que se están manejando. Sus palabras fueron refrendadas por el presidente del Principado, Adrián Barbón, con quien había mantenido un encuentro privado minutos antes. «Confiad en mí», fue lo que le trasladó Reyes Maroto al jefe del Ejecutivo regional. En el cara a cara reconoce que no se atrevió a darle una fecha, pero «me dijo que no tardará mucho, que una vez depurados los informes preceptivos, se lograría», apuntaló. Barbón, por su parte, le recordó que «tiene que entender la inquietud de las familias de toda España, pero en especial de las asturianas, que tienen preocupación porque el estatuto no acaba de salir».

Los informes pendientes a los que se refería la ministra son el visto bueno de la Comisión Europea y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Fue este supervisor el que obligó a paralizar la aprobación del anterior borrador en el último Consejo de Ministros antes de las elecciones del pasado mes de abril. A ellos habría que sumar otro procedente del Consejo de Estado. «Siempre hemos resuelto los problemas, incluso en momentos muy difíciles y dentro del marco del diálogo social, como el pasado miércoles (en referencia a la manifestación del sector industrial frente a la sede del ministerio)», subrayó Maroto. En cualquier caso, la aprobación no será definitiva. Después deberá pasar por la tramitación parlamentaria y por ello, la ministra apeló a que «contemos con un Parlamento que se crea que la agenda es importante, especialmente cuando llevemos leyes que necesiten modificar otras».

Para este anuncio, o anuncio del anuncio, según se quiera ver, la ministra no dejó la escenografía al azar: en el stand del Principado en Fitur, durante la celebración del Día de Asturias en esta feria de turismo, y en la jornada que mayor número de cargos institucionales se congregaban allí. Además del propio Barbón; la consejera de Turismo, Berta Piñán; la delegada del Gobierno, Delia Losa, y la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteseirín, entre otros. Precisamente, sobre esta localidad y su dependencia industrial tuvo unas palabras la ministra: «Hemos estado al lado de los trabajadores en crisis como la que hemos vivido con Alcoa en Avilés y no les hemos dejado solos, por eso pedimos que confíen, ya que tenemos cuatro años para hablar de política industrial en mayúsculas», recalcó.

El presidente regional también trasladó otras peticiones. Adrián Barbón destacó «la elevación de las compensaciones por emisiones de derechos de emisión del CO2 hasta los 300 millones y el ajuste en frontera, porque no tiene sentido que contaminar salga más barato». Otro punto que se puso sobre la mesa fue el de la reforma de la Ley de Industria que data de 1992. «Hace años que no existe una política industrial en este país y se ha comprometido a abordar esa ley en esta legislatura. Es una exigencia de nuestro Gobierno y ha aceptado», recalcó Barbón.

En un escenario de incertidumbres y compromisos por concretar, Reyes Maroto sí se atrevió a aventurar por dónde irán los pasos en los próximos años. Un esbozo contextualizado en los últimos indicadores del sector y que la ministra resumió en: «La mejora del contrato relevo que ha permitido la renovación de las plantillas en la industria manufacturera, la caída del precio de la energía que favorecerá la competitividad, el cambio de mix energético que tiene como resultados precios más bajos que ayudan a cubrir los sobrecostes y el plan Reindus que está facilitando la ampliación de plantas».

Tras un culín de sidra todo se ve mejor, y esa fue una de las paradas que hizo la ministra durante el recorrido al stand, tras saludar a todos sus trabajadores. Barriendo para casa, ya que estaba hablando de sus competencias, concluyó con un eufórico: «Construiremos sociedad mejor donde la industria tendrá una prioridad importante en la agenda política».