Sánchez defiende en Gijón el proyecto socialista de «justicia social» que comparte con Barbón
El presidente moviliza a unas 2.500 personas en Gijón y les insta a estar con «Milei, Abascal, Feijóo y Aznar» o «con el lado bueno de la historia»
Pedro Sánchez movilizó en la tarde de ayer a unos 2.500 militantes y simpatizantes asturianos en Gijón, donde apeló al voto de los «zurdos» ... para frenar a la derecha y a la ultraderecha europea porque, dijo, es «claro y meridiano» que «o se está con Milei, Abascal, Feijóo y Aznar o se está en el lado bueno de la historia». El presidente del Gobierno y líder de los socialistas reiteró en Asturias el mensaje que viene ofreciendo por toda la geografía española en los últimos días y alertó de un posible pacto de las derechas, azuzando el miedo a que Europa sea gobernada por «los amigos de Abascal». Señaló que tras la pandemia se ha podido comprobar que hay diferentes formas de hacer frente a una crisis económica y quiso recordar la respuesta «antisocial» que se dio a la crisis financiera posterior a 2008. Avisó del peligro que supondría el retorno de los «recortes de los hombres de negro» y pidió a los presentes que se imaginaran «si ahora vienen junto a la ultraderecha con la motosierra».
Frente a quienes defienden «los privilegios de unos pocos bajo la falsa bandera de la libertad», Pedro Sánchez dijo apostar por el proyecto socialista, que aboga por la «justicia social», la «redistribución de la riqueza» y el «Estado del Bienestar». Y fue en este momento de su discurso cuando dijo sentirse «orgulloso» de compartir ese proyecto político con Adrián Barbón, presidente de Asturias y líder de los socialistas asturianos, que le había precedido en la palabra y con quien minutos antes de comenzar el mitin bebió un culín de sidra a las puertas del Palacio de las Naciones de la Feria Internacional de Muestras de Asturias para conmemorar el Día Mundial de la bebida típica asturiana.
Ambos se dieron un baño de multitudes cruzando el recinto lleno a rebosar entre aplausos y vítores mientras sonaba con fuerza el himno europeo 'Oda a la Alegría'. Ya en el escenario, el secretario general del PSOE no hizo grandes referencias al Principado pero sí tuvo un cariñoso recuerdo para la histórica socialista 'Ángeles Flórez Peón', 'Maricuela', quien falleció el pasado 23 de mayo con 105 años, y un claro guiño hacia quien fuera su número dos, Adriana Lastra. «Los socialistas miramos hacia el pasado y vemos a 'Maricuela', miramos al futuro y vemos a Adriana Lastra. La derecha si mira al pasado ve la Sección Femenina y si mira al futuro la nada absoluta», comparó el dirigente socialista, tratando de zanjar cualquier duda sobre su relación con la ahora vicesecretaria general de Acción Política e Institucional de la FSA y diputada nacional.
Por otro lado, y recogiendo el guante del PP, que ha tratado de convertir esta campaña electoral en un plebiscito sobre el futuro de Pedro Sánchez en la Moncloa, el presidente ironizó sobre los «arranques de sinceridad de (Alberto Núñez) Feijóo» y su «propuesta de presentar una moción de censura con Abascal y Puigdemont. Están absolutamente desesperados. Yo tengo una propuesta mejor, votar al PSOE», clamó eufórico, al tiempo que mencionó la reciente victoria de las elecciones catalanas como respuesta a quienes dicen que «España se rompe». «Si acabamos de ganar las elecciones en Cataluña, si crecemos por encima de la media europea», respondió. «España es un ejemplo en Europa y en el mundo» y, por eso, prosiguió, «lo que no quisimos para España, no lo hagamos para Europa». Pidió por tanto acudir «en masa» a votar y se dirigió especialmente a los jóvenes, a las mujeres y a los mayores. Están en juego, dijo, asuntos capitales como «el compromiso climático» o «la reindustrialización en verde de Asturias». Pero también, añadió, «nos estamos jugando que tengamos un mundo en paz, con gobiernos que luchan y son coherentes con el orden multilateral basado en reglas en Ucrania y también en Palestina».
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