¿Cuánto le costaría a cada español una repetición electoral?
El escaño arrebatado por el PP al PSOE en Madrid dificulta aún más la formación de un Gobierno y abre las puertas a unos nuevos comicios
I. G.
Sábado, 29 de julio 2023
La aritmética la carga el diablo deben pensar en buena parte de las sedes de los partidos políticos tras el escrutinio definitivo de las elecciones de este 23 de julio. Al ya exiguo margen que le vaticinaban los pactómetros a una posible suma de PSOE, Sumar y los partidos independentistas hay que añadirle el nuevo asiento que el PP le ha arrebatado a los socialistas en la Comunidad de Madrid con el recuento del voto CERA, lo que reduce y apretaría aún más una posible investidura de Pedro Sánchez, obligándole a necesitar el sí de Junts en vez de una simple abstención.
Con este escenario pues, la repetición electoral gana enteros. Y es que si una investidura de alguno de los dos candidatos con opciones —Feijóo o Sánchez— parece complicada, más lo sería la futura estabilidad de un gobierno tan cogido con pinzas a la hora de sacar adelante los presupuestos o cualquier reforma de calado.
Algo parecido ocurrió tras las elecciones generales de abrir de 2019. Por aquel entonces, el PSOE ganó con claridad, pero fue incapaz de formar gobierno con Ciudadanos, ni Unidas Podemos, y los españoles tuvieron que pasar por las urnas de nuevo en el mes de noviembre, de donde salió la composición del Congreso de los Diputados y el último Gobierno presidido por Pedro Sánchez estos casi cuatro años.
El coste de celebrar unas elecciones generales
Precisamente si tomamos como referencia el caso de 2019, el montante total de los diferentes procesos electorales a los que fueron llamados los españoles fue de nada menos que 448 millones de euros, según los datos de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE). Aunque eso sí, se incluyen ambas generales y los comicios autonómicos, municipales y europeos que se celebraron ese año. Si solo atendemos a las elecciones generales, las del 28 de abril de 2019 tuvieron un desembolso de 139 millones de euros, mientras que el gasto del 10 de noviembre de ese mismo año fue de 136 millones.
Una cifra ligeramente superior a los comicios generales que las habían precedido: 130,6 millones en 2016; 130,2 en 2015; 125 en 2011 y 131,6 en 2008. Así pues, con la excepción de las de 2011, oscilan en la orquilla de los 130 y 140 millones de euros, lo que dividido entre los 47 millones de habitantes con los que cuenta el país daría una cifra de unos tres euros por habitante. Esto es lo que a cada español le costaría de media organizar unas elecciones generales.
¿De dónde sale ese gasto?
La principal partida de ese total —58,8 millones en 2019— tiene que ver con la organización de la votación en sí. Es decir, el coste de desplegar a las decenas de miles de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que garanticen que la jornada transcurre con normalidad en los diferentes centros de votación y de la Oficina del Censo Electoral. Una cifra ligeramente inferior (56,5 millones) se empleó en el sufragio del voto por correo. La cantidad restante, de unos diez millones de euros, es la que se destina a la retribución de los miembros de los colegios y otros gastos similares.
