«Haber estado más de 50 años callada es, al menos, sospechoso»
Vanessa García, hija de Manolo Escobar, no se cree la historia de la gijonesa que asegura que el cantante era su padre
La demanda de parternidad presentada por María Eva García Figueras, vecina de Gijón, en el juzgado de Primera Instancia de Villaviciosa en la que reclama ser reconocida como hija de Manolo Escobar sigue dando que hablar. Vanessa García, hija del cantante, ha explicado a El Mundo que está tranquila porque «todo es mentira». «Haber estado más de 50 años callada es, al menos, sospechoso».
«En el hipotético caso de que mi padre hubiera tenido una hija, no nos lo hubiera ocultado jamás», subraya Vanessa. No obstante la magistrada titular del juzgado de Instrucción y Primera Instancia de Villaviciosa ha dado un paso más en el procedimiento al decretar la apertura de las investigaciones judiciales respecto a la reclamación de la presunta hija del cantante.
Una de las pruebas de cargo que presenta la presgunta hija del cantate, que tiene 58 años, es una carta manuscrita por su madre en la que se puede leer: «Yo, con la cabeza lúcida, afirmo y juro que antes de mi matrimonio hubo una relación de novios con Manuel García Escobar. Después mi María Eva nació por esa relación anterior. Mi hija María Eva García Figueras es hija natural, de sangre, de Manuel García Escobar, el conocido Manolo Escobar. Lo firmo y juro».
En la demanda aporta además fotografías de su niñez en 'El Porompompero', la casa que el artista tenía en Alicante. La historia vital que narra la presunta hija secreta de Manolo Escobar tiene sus inicios en los años cincuenta, cuando durante seis años su madre y el almeriense supuestamente mantuvieron una larga relación. María Eva García Figueras nació el 26 de noviembre de 1960, un año después de que el cantante se casase con Anita Marx, con la que adoptó la que, salvo que la Justicia dicte lo contrario, es su única hija, Vanessa.
Se da la circunstancia de que María Eva García Figueras comparte el primer apellido con el cantante, pero también con sus hermanas de madre, ya que su progenitor legal también se apellidaba García. Además de la demanda de paternidad, esta vecina de Gijón ha renunciado expresamente a los derechos respecto al considerado padre legal, un trámite obligatorio para todo aquel que reclame ser reconocido biológicamente por padre o madre pero legalmente sea hijo de otra persona.
La ley señala que en ningún caso se admitirá la demanda sobre una reclamación de paternidad si con ella no se presenta un principio de prueba de los hechos en los que se funda esta reclamación. Las pruebas pueden ser diversas, como material fotográfico, testigos, cartas o cualquier otro indicio que ayude a sustentar la acreditación de esa relación de la que se asegura nació un hijo. El siguiente paso sería la realización de pruebas biológicas, un análisis de ADN para identificar la carga genética que puedan compartir. En este caso, el cadáver de Manolo Escobar fue incinerado tras su muerte -sus cenizas quedaron enterradas en el cementerio de Sant Jaume de Benidorm-, por lo que los análisis se deberían realizar a uno de los hermanos vivos o, incluso, ordenar la exhumación de los restos mortales de los ya fallecidos. El artista era el quinto de diez hermanos.