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Operaciones de carga de clínker en los muelles de la dársena de San Juan, en Avilés.
Gijón, alternativa para el clínker

Gijón, alternativa para el clínker

El puerto de Avilés exige a Tudela Veguín inversiones para reducir la contaminación

J. F GALÁN / N. PRIETO

Martes, 19 de julio 2016, 01:15

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El puerto de Avilés podría perder los tráficos de clínker, principal componente del cemento Portland, y por tanto del hormigón. Según la Autoridad Portuaria avilesina, la negativa de Cementos Tudela Veguín -sociedad que en régimen de autorización mueve en Avilés la práctica totalidad de este granel-, a adoptar las medidas encaminadas a reducir las emisiones contaminantes (partículas pm10) que impone el Principado y, por otro lado, la solicitud cursada por Asturiana de Zinc para ocupar mediante concesión el muelle en el que se concentran estas operaciones, serían las causas.

En los últimos dos meses no se ha movido una sola tonelada de clínker y tampoco hay ninguna prevista para la presente semana. Si la situación se mantiene supondría un serio revés para los intereses comerciales del puerto, ya que en 2015 se movieron unas 300.000 toneladas de ese producto, el 6% del tráfico total, ligeramente superior a cinco millones de toneladas. En años anteriores se llegó a 600.000.

Integrada en el Grupo Massaveu, Cementos Tudela Veguín cuenta con centros de producción en la localidad ovetense que da nombre a la sociedad, así como en Aboño, Narón (La Coruña) y en La Robla (León), de donde procede el grueso del clínker que, por carretera, llega al puerto de Avilés para su embarque.

Según la Autoridad Portuaria avilesina, la empresa no ha hecho el esfuerzo necesario, al menos no en su totalidad, para reducir la contaminación que genera su actitivad, que se concentra en el muelle Sur de la dársena de San Juan. «El Principado tiene una normativa que hay que acatar. Si quiere seguir operando tendrá que actuar en consecuencia. Tendrá que invertir», manifestó, tajante, el presidente de la entidad portuaria, Santiago Rodríguez Vega.

Producto contaminante

Al tratarse de un producto catalogado como potencialmente contaminante, la autorización concedida a la empresa cementera que regula las operaciones de clínker impone unas exigencias especiales. Rodríguez Vega va un paso más allá, sin cerrar la puerta. Además de cumplir la normativa, Cementos Tudela Veguín «tendrá que trasladar sus operaciones a otra zona del puerto o solicitar la correspondiente concesión para continuar haciéndolo en el espacio que ahora ocupa. Si quiere seguir en Avilés les ofrecemos soluciones, siempre y cuando cumpla con la normativa medioambiental», reiteró.

Cementos Tudela Veguín, el consignatorio que realiza las operaciones, Alvargonzález, y la Autoridad Portuaria tienen previsto reunirse esta semana para abordar el asunto y encontrar una solución. Si no fuera así, los tráficos de clínker podrían desplazarse a otro puerto, previsiblemente al de Gijón, ciudad en la que Alvargonzález tiene su sede central y en la que lógicamente también rige la normativa medioambiental del Principado.

¿Estrategia negociadora?

El Musel mueve ya unas 600.000 toneladas al año de clínker. En realidad, Tudela Veguín reparte entre los dos puertos asturianos de interés general del Estado sus exportaciones. Hasta ahora y, en general, la producción de La Robla sale por Avilés y la de Aboño, por Gijón.

Las condiciones de embarque no son en El Musel muy distintas en lo que a medios utilizados, si bien el Muelle Norte de la ampliación, que es el habitualmente utilizado, además de disponer de un amplio espacio, se encuentra bastante más alejado de la ciudad que los muelles avilesinos, y en esa zona se están adoptando ya medidas para evitar en lo posible el impacto contaminante.

Parece lógico que si hay que realizar inversiones no se dupliquen, cosa que favorecería la concentración, pero en Gijón existen dudas sobre si abrir la posibilidad de que el clínker abandone Avilés es sólo una estrategia con vistas a la negociación abierta y más bien se apuesta porque las cosas acabarán quedando más o menos como están.

De momento es difícil precisar si ya se está produciendo algún desvío de mercancía hacia Gijón, pero fuentes consultadas por este periódico indican que no hubo ningún trato al respecto, que, en principio, tampoco haría falta porque, como queda dicho, se trata de un tráfico ya existente, que tan solo haría aumentar.

El clínker es un producto de poco valor añadido, como la mayoría de graneles sólidos, pero no por eso deja de ser delicado en el sentido de que tiene en el agua un enemigo importante, circunstancia que favorece la dispersión de polvo.

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