Gijón se vuelve a teñir de rosa con un grito de esperanza

Gijón se tiñó de rosa con una 'mareona' de 5.000 personas, la inmensa mayoría mujeres, que participaron en la Carrera de la Mujer contra el cáncer, organizada por Central Lechera Asturiana y que un año más volvió a poner de manifiesto la necesidad de destinar fondos a la investigación y de arropar a los enfermos y a sus familiares.

Anunciaban lluvia, pero aún así, pocas faltaron a la cita que finalmente pudo con las nubes y los chubascos y se desarrolló con un cielo claro de domingo. «Mira, al final siempre sale el sol», comentaba María José Bada, que hace cinco años fue operada de cáncer de mama y hoy por la mañana corrió «por todas las que están pasando por lo mismo que yo». Y como ella, otras miles de mujeres: madres, abuelas, niños pequeños en carrito, en patinete, en cuello de sus madres... El objetivo era uno: concienciar y apoyar, todo en un ambiente festivo y marcado por la esperanza.

Laura Fernández Silverio, del Grupo de Cultura Covadonga, fue la vencedora de la prueba en la categoría absoluta. Aunque ganar, ganaron todas, desde la primera hasta la última. La carrera discurrió desde la avenida de Albert Einstein hasta Las Mestas, por con un recorrido de cinco kilómetros por el entorno del Piles y el parque de Isabel La Católica.

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