Borrar

¡Oh Capitán, mi capitán!

Viernes, 4 de julio 2025, 18:41

Ahora que se habla de Santi Cazorla por haber cambiado los millones del petróleo por su sueño de niño y poner el broche de oro ... a su carrera devolviéndolo a Primera División, me parece injusto no acordarse y valorar la gesta que en su momento hizo uno de mis ídolos de la infancia, que a la vez es un emblema y un estandarte de los años de barro del club. Don Diego Cervero Otero pertenece a esa generación que entrenaba sin luz ni agua en el Requexón y, como comentaba Kily en una entrevista, uno de los responsables de que muchos jugadores del Oviedo no dejaran en ese momento el equipo, porque les llamaba prácticamente todas las mañanas pidiéndoles que se quedaran.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio ¡Oh Capitán, mi capitán!