Melquíades Álvarez, la trágica tercera vía
Los militantes del Partido Reformista ideado por Melquiades Álvarez en la II República, denominado Partido Republicano Liberal Demócrata, no han tenido suerte, empezando por el ... propio fundador. Lo sé por propio parentesco. Un primo lejano de mi abuelo fue Manuel Rico Avello, nacido en Villanueva de Trevías, pueblo valdesano en donde después de la guerra ejerció de maestro Fernández Inguanzo, comunista cabal y buen paisano. Rico Avello murió fusilado en el asalto de las milicias republicanas a la cárcel Modelo de Madrid, junto a Melquíades. Otro notable 'melquiadista' fue mi tío abuelo Mariano Merediz Díaz-Parreño, fusilado en Gijón el 14 de agosto, en la triste 'saca' de presos de San José. Los reformistas de Melquiades tenían todas las cartas para ser fusilados por los dos bandos, en uno por republicanos burgueses, en otro por demócratas y desafectos con el Movimiento.
En mi opinión, la visión más cercana y en cierto sentido desprejuiciada no solo del estadista gijonés, sino de su entorno y familia, la escribió Sarah Álvarez de Miranda, nieta del político: 'Melquíades Álvarez, mi padre. En el canto de la moneda', editada por Nobel. Sarah escribe en primera persona como si el libro lo escribiese su madre, Matilde Álvarez, una de las hijas de Melquiades. El ambiente familiar, la descripción realista de la vida turbulenta en el Madrid de la guerra, la admiración por el padre magistralmente perfilado, se recogen en estas memorias con la claridad de un ameno e interesante relato.
En la exposición 'Melquíades Álvarez. El centro reformista' que se puede ver en el Antiguo Instituto reivindica su figura e ideario político con interesantes documentos gráficos vamos entreviendo el talento y la grandeza del prócer gijonés. Como fondo, el fracaso de las políticas moderadas y de centro en España, antes y ahora. La exposición es buena, pero, como otras organizadas por el Ayuntamiento, por ejemplo, la fotográfica recientemente clausurada en el Palacio de Revillagigedo, está coja. A ambas les falta un buen catálogo, en el caso de Melquíades muy necesario, para que estas exposiciones no sean 'flor de un día'. Exposiciones efímeras que se olvidan cuando se cierran.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión