Carlos Fernández Llaneza | Portavoz Municipal del PSOE

«El pacto PP-IU va a terminar como un abrazo del oso de Canteli a Llamazares»

–¿Por qué no le gusta el presupuesto para 2025?

–Primero, es un presupuesto restrictivo con relación al de hace dos años. Una ciudad tiene que crecer. En segundo lugar, tiene unas subidas impositivas considerables. Apuesta por unos proyectos que creo que puedan estar bien pero luego otros faltan. Un presupuesto nuestro sería un presupuesto que apostase mucho más por las personas, es decir, potenciar mucho más el área social y la cultura. Por ejemplo en Cultura se recortan 800.000 euros. Apostaríamos mucho más por la sostenibilidad, que tendría que ser una política absolutamente transversal. Y ahí es donde creo que haríamos un esfuerzo muy transformador de la ciudad. En todas las políticas de sostenibilidad que, además, están muy imbricadas con el resto de políticas. Sobre todo, evidentemente, con el tema del urbanismo e infraestructuras. Tendríamos una apuesta mucho mayor por Europa, con esa creación de la oficina de asuntos europeos. Apostaríamos más por los mayores, con la Concejalía de Mayores.

–Parece una enmienda a la totalidad.

–Puede ser (sonríe). Apostaríamos más por la zona rural, con un plan integral de zona rural como el que teníamos. Hubiéramos apostado mucho más por el Naranco, con un plan integral de recuperación para el Naranco que teníamos en campaña. Porque lo único que queremos es recuperar el espacio, el Naranco como el espacio natural que es, de proximidad. Y es muy fácil. Se ha hecho algo, que se ha hecho bien, como que se están manteniendo limpios los caminos y se están señalizando los lugares de valor, de interés cultural, etnográfico, etc. Y luego lo que hace falta es restaurar todos esos elementos, que se puede hacer a través de escuelas taller, y lo que es más importante, que el Naranco pase a ser ovetense. Ahora mismo hay tres grandes propietarios, cuatro, que estarían dispuestos a vender el terreno para que el Naranco sea una propiedad municipal, para que la puedan disfrutar todas y todos los ovetenses y luego hacer del el tránsito entre Santa María y San Miguel, una peatonalización blanda, porque creo que hablar de una alternativa, de una variante para subir a la cima sería una barbaridad que puede retrasar todo.

–El PP dice que la subida de impuestos es culpa de Pedro Sánchez.

–Me hace gracia que hablen del basurazo. Es algo que se sabe desde hace años, es una directiva europea que España tiene que adoptar, que los ayuntamientos tienen que adoptar, pero se olvidan del sablazo del 65 por ciento en conciliación, y el 10 por ciento en el agua, y la subida también en servicios funerarios, o sea que también hay otros sablazos por ahí. Y en la basura, lo que es muy importante y no debemos perder de vista es que no estamos haciendo los deberes en reciclaje. Europa nos va a poner para el 2025 un 55 por ciento de basura reciclada, estamos en un 27 por ciento, si no ha bajado con la implantación del cubo marrón. Lo que tenemos que hacer para no pagar es reciclar, porque tonelada de basura que llega separada paga mucho menos. Entonces claro, lo que no podemos quedarnos es en el basurazo y decir, no, es que nosotros no estamos haciendo nada para subir de ese 27 por ciento en el que estamos ahora al 55 por ciento. Y el ayuntamiento es el que tiene las competencias y quien gestiona los camiones de basura.

–¿Por qué dice que el presupuesto es derrotista?

–Es muy conformista y es poco ambicioso. Le falta ambición, le falta expansión, le falta tocar cuestiones que son básicas para la ciudad, y para mí hay una cuestión básica que para responder a todas las preguntas tenemos que tener herramientas para favorecer las respuestas. Si yo soy alcalde, lo primero que haré será poner en marcha un plan general de ordenación, un plan estratégico y un plan de movilidad. Con esos tres elementos tienes las herramientas para tener la visión de conjunto necesaria de ciudad, la visión integral de ciudad que necesitamos para poder responder adecuadamente a muchas preguntas. Lo que se está haciendo ahora son muchas actuaciones aisladas porque hablar del Cristo, o de la Vega, o de la fábrica de gas, o de San Claudio si no tienes un plan estratégico de ciudad, no tienes un plan general de ordenación y no tienes un estudio de movilidad es mucho más complicado. Por eso creo que son tres herramientas fundamentales que deberíamos habernos dotado de ellas ya. Y yo, si llego a ser alcalde, lo primero que haré será poner en marcha esas tres herramientas.

–¿Quiere repetir como candidato en 2027?

–Sí, si quieren los militantes. Y si ellos quieren ganaremos las elecciones, somos la alternativa de gobierno.

–¿El pacto ha hecho que IU les pase por la derecha?

–Ellos verán lo que hacen. Yo creo que cada partido tiene su estrategia y en función de esa estrategia actúa. A mí me sorprende pues el otro día nos acusaban de ser oposición clásica. Bueno, pues sí, somos tan clásicos que cuando negociamos algo nos gusta verlo reflejado en los presupuestos. Si yo pido determinada actuación, quiero que esté reflejada en el presupuesto y las suyas no están reflejadas. Podemos hablar de lo que quieran pero una propuesta que no tiene reflejo presupuestario es como polvo, es papel mojado.

–¿En qué momento su relación con el alcalde giró a mal como se vio el jueves en el Pleno?

–Cuando ve que no le hacemos la ola, que no le damos la razón porque el juega al o estás conmigo o estás contra mí. Cuando se ve que se están haciendo chapuzas y las están haciendo sistemáticamente, nuestra obligación y nuestra responsabilidad es decirlo, les guste o no, dentro del juego del marco democrático. Lo que pasa que este hombre, su talante democrático es menos que el que tiene un ameba. Tiene que darse cuenta de que somos partidos distintos, que tenemos visión de modelos de ciudades diferentes y que nuestra tarea es fiscalizar la tarea de gobierno. Y si hacen algo mal, nuestra obligación y nuestra responsabilidad es decirlo y denunciarlo, y en El Fontán se han hecho cosas mal y en las becas se hicieron cosas mal, la idea inicial que tenían para la Vega no nos gustaba, el recinto ferial de la Florida es una chapuza que no saben cómo salir de él. No hay plan en el Calatrava y condona el IBI.

–Tiene fama de blandón.

–Yo no soy blandón pero tampoco me ofenden los que lo dicen. Creo que en la política no se deben perder las formas. Soy una persona muy de consenso. En el Grupo Municipal todos opinan y las decisiones las tomamos entre todos. No me gusta enfadarme, porque creo que cuando te enfadas, cuando empiezas a gritar, es cuando pierdes un poco los argumentos. Lo que pasa que, bueno, a veces la vehemencia te puede. El jueves fui un poco vehemente porque hay cosas que me ofenden, y me ofenden mucho que me llamen mentiroso, y me ofende mucho que digan que no quiero a Oviedo. Porque en lo de querer a Oviedo o conocer Oviedo, de los 27 concejales no voy a decir que soy más que nadie, pero no menos porque llevo muchos años, desde que nací, conociendo Oviedo de la mano de mi padre, y por devoción, leyendo, recopilando bibliografías sobre Oviedo. Yo no he venido aquí ni a lucrarme ni a contar mentiras.

–¿Puede ser Llamazares un alcalde en la sombra tras el pacto con el PP?

–Ni es así ni tiene importancia. La estrategia de Izquierda Unida es Izquierda Unida quien la define, y serán sus militantes quienes la juzguen. Yo temo que sea el abrazo del oso de Canteli pero ellos verán lo que hacen.

–El campo de San Francisco es su caballo de batalla junto con el Naranco.

–Tenemos un mosaico de Antonio Suárez en el paseo de Los Álamos que se está maltratando y vejando. Esto es para caerle la cara de vergüenza al alcalde. Castelao, el arquitecto, lo definió como la mejor obra de arte urbano de Asturias sin duda. Pero el PP no tiene la sensibilidad siquiera de decir, oye, esto es una obra de arte. No podemos poner un bloque de 500 kilos para poner un adorno de Navidad. Vamos a ponerlo en otro sitio, no se les ocurre. No tienen esa sensibilidad. Aquí hace muchos años, había un alcalde, que era Fernández Ladreda, que cuando se intentó poner una serie de cosas adicionales en el Campo San Francisco dijo que fuera todas las cosas del campo. Tenía más sensibilidad Fernández Ladreda que Cantelli. Y cualquier alcalde franquista ha tenido más sensibilidad que éste.