Ana Nebot y Juan Noval transportan el Auditorio a París

La soprano ovetense Ana Nebot levantó ayer el telón a la programación de San Mateo en el Auditorio Príncipe Felipe. Acompañada por el tenor sierense Juan Noval y con Arkaitz Mendoza al piano, la sesión transportó al público a los salones del París del siglo XIX y comienzos del XX. Un canto al amor y a la ciudad de la libertad y la fraternidad.

«Estamos viviendo una situación extraña y a la vez tenemos muchas ganas de estar aquí, vamos a tratar de olvidar un rato lo que está pasando, traten de viajar con la mente a París, esa ciudad que es un canto a la cultura, a la belleza y a la alegría de vivir», saludó la soprano al público.

Sin atriles, -no los solicitaron para evitar tener algo entre público y artistas-, el trío cosechó ovación tras ovación. Además, el formato reducido de la sala de cámara del Auditorio permite crear un ambiente intimista y cercano a intérpretes acostumbrados a tablas más grandes.

Si Festejos apostó por valores seguros para dar inicio a la programación mateína, afuera, el protocolo de seguridad ensayado para el resto de los conciertos exhibió su músculo. Policía, Bomberos y Protección Civil organizaron en la plaza del Fresno el puesto de mando avanzado para evitar cualquier eventualidad durante los conciertos.

Sin agobios ni aglomeraciones, el público fue ocupando sus localidades de manera ordenada. El miércoles se repetirá la fórmula reducida con el concierto lírico de Beatriz Díaz, María José Suárez y Marcos Suárez. Al Ayuntamiento le preocupan más las citas del fin de semana cuando con 700 personas sí que se puedan formar aglomeraciones.