Informes médicos y 15.857 firmas avalan que el nuevo colegio de Montecerrao necesita una piscina

Ni las familias ni los profesionales. Cuatro expertos sanitarios, el responsable de la unidad de Neuropediatría del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), Ignacio Málaga; el director de Pediatría del Hospital Valle del Nalón, Marcelino García-Noriega Fernández; el jefe del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del área sanitaria IV, José Antonio Fidalgo, y la fisioterapeuta Reyes González, avalan esta petición. El argumento general de sus escritos son los beneficios de este tipo de terapias. «La piscina no es un complemento, es una herramienta terapéutica fundamental. En los niños con diversidad funcional, el medio acuático permite trabajar aspectos clave del desarrollo físico y neurológico como el tono muscular, la coordinación motora, la propiocepción, la integración sensorial, la regulación emocional o la socialización», en palabras de García-Noriega. El tanque de Hubbard, añade, está más orientado en terapias pasivas e individuales.

En los últimos años, remarca Fidalgo, esta última instalación ha dejado de utilizarse «por su elevado coste, por la gran cantidad de agua caliente que precisa, por el tiempo que se tarda en limpiar –después de cada uso–, como por las ventajas ya comentadas que nos ofrece la piscina». Beneficios físicos, psicológicos y sociales, explica Málaga, para niños no solo con parálisis cerebral sino también con Trastorno del Especto Autista (TEA), síndrome de Down, enfermedades neuromuscurales o síndrome de Rett, entre otros. «Es un recurso que considero esencial para el bienestar y desarrollo físico y mental de los alumnos», indicó González Álvarez.

El presidente de la AMPA, José Manuel de la Grana, confió ayer en que la Consejería de Educación atienda este petición, que llevan demandando desde noviembre de 2023, aunque «nunca tuvimos respuesta». Esperan que ahora se revise el proyecto para su inclusión, y para ello remiten su carta de peticiones tanto al presidente regional, Adrián Barbón, como a la consejera de Educación, Lydia Espina. De la Grana detalló que podría ser utilizada por entre 8 y 10 niños a la hora, unos 40 al día, de forma que alrededor de 200 podrían beneficiarse a la semana. También el invernadero, aunque este proyecto consideran que es sencillo incorporarlo posteriormente.

Las familias han encargado, por otra parte, un informe técnico para exponer la «saturación del colegio, la falta de mantenimiento y la situación de abandono en general en que se encuentra, aunque la consejera dice que cumple con la normativa». Entre ellas, la falta de espacios en las aulas o los desconchones.

El Principado, no obstante, ha anunciado mejoras en estas instalaciones.