El centro comercial del Calatrava cierra de forma definitiva

El 31 de marzo de 2019, la propietaria del centro comercial Modoo del edificio Calatrava decidió echar el cierre. Todos los negocios bajaron las persianas salvo uno, el Burger King, que logró unas medidas cautelares que le permitieron mantenerse abierto. Hoy la suerte del complejo no es mucho mayor, la propiedad ha entrado en concurso de acreedores y liquidación de activos y la administración concursal ha decidido hacer efectiva la clausura total de las instalaciones de Buenavista. La que se conocía como «la resistencia» del Calatrava, la conocida hamburguesería, no ha podido abrir sus puertas.

La razón que han alegado los responsables del concurso es sencilla. «No se puede seguir costeando el gasto que supone tener el centro medio abierto con todos los suministros, personal de mantenimiento, seguridad, seguro, etc.». No en vano, mantener las instalaciones en funcionamiento supone el desembolso de «entre 25.000 y 30.000 euros» mensuales, han advertido las mismas fuentes, que señalan que en todo caso la medida se debe a la «falta de liquidez» y a la «necesidad de velar por los acreedores».

No obstante, la Audiencia Provincial recientemente ha fallado a favor de la propietaria del Burger King. A la franquiciada, Arnicio Restauración, se le reconoció la validez del contrato de arrendamiento hasta 2036, y al tiempo que se les instaba a negociar con la administración, la sentencia reconocía el derecho de la hamburguesería a permanecer en el complejo sin pagar alquiler ni otros castos comunes, que ascendían a unos 13.000 euros al mes. La empresa ya ha puesto el caso en manos de sus servicios jurídicos, según ha podido averiguar este diario.