Oviedo

Ventanielles espera que la rehabilitación de 32 viviendas con fondos europeos comience en mayo

Una obra muy esperada y enfocada al cambio de cubiertas, ventanas, colocación de Sate en la fachada y aislante en el forjado sanitario a los portales que sea posible, que dirán adiós de una vez por todas a los problemas de condensación y de ruidos. Unos inmuebles en los que las fachadas «se están cayendo», en palabras de Regina González.

En su vivienda, como en la de Oliva Álvarez y José Ramón Díaz, la humedad es unos de los enemigos a combatir. «Siempre estoy con el deshumidificador, se me estropea la ropa...; tenemos que tener los armarios abiertos», coinciden estas vecinas. Los edificios, en definitiva, son «muy antiguos» –datan de los años 50–, por lo que aguardan con esperanza la mejora, además de consiguiente ahorro en calefacción.

Según lo que les han trasladado, en mayo comenzará la actuación, a cargo de Esfer. El tiempo apremia porque tiene que estar finalizada el 30 de junio de 2026. En poco más de un año. Fondos europeos en juego.

Almudena Pando, de la asociación vecinal Nuevo Ventanielles, explica que «llevamos muchos años esperando» por esta obra que, aclaró, saldrá adelante gracias al empeño vecinal y el trabajo de la adjudicataria. Porque, según sintieron, el Ayuntamiento no les acompañó a su mismo paso.

En una conversación con Noelia García, representante de la misma asociación vecinal, Pando recuerda que todo comenzó en 2022 cuando la empresa Esfer «se puso en contacto con la asociación de vecinos y con la de Guillén Lafuerza para explicarnos la existencia del proyecto y que había fondos europeos para programas de rehabilitación y regeneración de barrios». Tras una primera reunión con el Ayuntamiento en la que «no nos supieron dar mucha información», salió a información pública el proyecto, los vecinos eligieron a Esfer y desde el colectivo vecinal se pusieron manos a la obra.

«Hicimos una asamblea y buzoneamos los 162 portales con la información que teníamos; ahí echamos en falta que alguien del Ayuntamiento viniese a explicar en qué consistía realmente el proyecto, dar un poco de credibilidad y solvencia». «Fue la asociación con recursos propios la que tuvo que sacar las copias, pegar cartelinos...», inciden. Y no fue hasta 2024 cuando el concejal Nacho Cuesta «bajó a decirnos que iban a dar estas ayudas». El Consistorio afrontará el 20% de la obra que no cubre Europa.

Porque el proyecto podía aspirar a 9 millones de euros de la Unión Europea; sin embargo, la partida conseguida fue mucho más reducida. «El Ayuntamiento no se tomaba en serio este proyecto y presentó la convocatoria el último día, consiguió la mitad de dinero, nos dio una rabia tremenda. Esos casi cuatro millones y medio obtenidos dan para esta fase y la manzana de Río Sella que está detrás se queda para una segunda fase». A pesar de que las deficiencias –humedades, desconchones...– revelan la necesidad de una obra urgente, que los vecinos esperan que llegue a lograrse.

Los residentes del barrio sólo confían en que los cuatro edificios que se mejorarán no sean islas aisladas, con unos vecinos afortunados frente a otros. Les hubiera gustado que mientras abordaba esta primera fase, la segunda se desarrollará de manera progresiva, pero «está estancada», advirtieron con la esperanza de que se reconduzca; «Nos quedaría bárbaro el barrio».