Cuando la mala suerte te acompaña incluso en día de tu boda

Una boda, la propia, es uno de los días más especiales en la vida de una persona. A la fecha señalada le anteceden meses de preparativos, la ilusión de compartir la felicidad con amigos y familia, los inevitables nervios. Los novios consultan el parte meteorológico para saber si el tiempo les acompañará, visitan tiendas y diseñadores hasta dar con el vestido ideal...

Sin embargo, por mucho que se planee, siempre algo puede saltarse el guión previsto y arruinar el momento. A Hollee Lynnea-Kolenda Darnell, una joven estadounidense, le salieron varias cosas rematadamente mal. Aún así, siguió adelante con la boda y ahora está felizmente casada.

¿Qué probabilidades hay de que desvanecerse en una boda, vomitar y que encima un bebe se haga de vientre sobre ti? Todo eso le ocurrió a ella en mitad de la ceremonia civil para sellar su amor. La joven trató de decirle a su futuro marido que algo iba mal pero él no reaccionó y, para cuando se dio cuenta, se estaba cayendo sobre él.

En realidad, pensó que ella bromeaba. Tras el desvanecimiento, provocado por la deshidratación. la falta de hierro y la tensión baja, la joven se aleja a un lado del templete para vomitar. Su hermana se acerca para asistirle, mientras lleva a su bebé en brazos y, de nuevo, la mala suerte se ceba con la contrayente.

En el momento en el que su familiar le entrega un abanico, el pequeño hace de vientre. La caca desborda el pañal y acaba manchando el blanquísimo vestido de su novia, que con el paso del tiempo se lo ha tomado con humor y compartido un fragmento de su inolvidable día.

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