«Me dais asco», dice Froilán a miembros del PCE que se mofaban del 'encontronazo' entre reinas

Alba regresaba este domingo del comité central de su formación en Madrid junto con los ediles los concejales Eduardo Zorrilla y Remedios Ramos. En un momento determinado, los tres estaban conversando sobre el polémico vídeo de las reinas en Palma y comentado lo memes que raíz de lo ocurrido salieron fueron surgiendo. Se trataba de una conversación jocosa en la cafetería del tren, pero las bromas sobrepasaron el ámbito de una conversación privada y se convirtieron en una discusión cuando, de pronto, Remedios Ramos miró al otro lado del vagón hacia un joven que les dijo: «¡Qué asco!», según cuenta la edil. Ella le increpó: «¿Qué estás diciendo niño?», y al parecer éste afirmó: «Vosotros dais asco». En este punto, terció Ernesto Alba preguntando «¿qué te pasa?». El chico, según los dos ediles, puntualizó: «Vosotros sabréis que sois los que os estáis riendo».

A continuación, según apunta Zorrilla al diario SUR.es, decidieron dejar la conversación porque el asunto se ponía muy tenso. Ramos explica que se dio cuenta de que era el hijo de la infanta Elena, Felipe Juan Froilán. Tras el rifirrafe, Froilán realizó una llamada y empezó a referirse a ellos con improperios, con palabras malsonantes tales como «hijos de puta» y «flojos de mierda», según explican los miembros del PCE.

Así lo relataba ayer Ernesto Alba:

Todo esto habría ocurrido mientras la Casa Real se esfuerza por zanjar la polémica y dar una imagen pública de unidad. Así, este este domingo, los Reyes don Felipe y doña Letizia, la Reina Sofía, la Princesa Leonor y la infanta Sofía, se paraban a atender a los medio a las puertas del hospital en el que el Rey Juan Carlos, que sigue hospitalizado recuperándose de una operación de rodilla. Tras preguntar por el estado de salud del monarca, los periodistas apostados a la entrada del centro sanitario no podían desaprovechar la oportunidad de preguntarle al Rey por «la imagen de unidad» que dieron minutos antes al posar todos juntos tras el sonado desencuentro . «Todo está bien», zanjó el monarca.

El sábado ya se había buscado amainar la tormenta con la visita de doña Letizia y su suegra, doña Sofía, al Rey emérito. Ambas acudieron juntas al Hospital Universitario Sanitas La Moraleja y se dejaron fotografiar sonrientes. Más aún: la Reina abrió la puerta del coche oficial para que doña Sofía pudiera salir cómodamente y, más tarde, la dejó pasar primero por la puerta de entrada.

Pero faltaba la foto con las niñas, protagonistas involuntarias de las imágenes que han dado la vuelta al mundo y por las que tanto se ha cuestionado a la Reina.

Las cámaras estaban preparadas y cuando se abrieron las puertas del coche los flashes saltaron. La Reina, en esta ocasión, abrió la puerta trasera para dejar salir a su hija Leonor. El Rey hizo lo propio para ayudar a su hija menor, Sofía. En el medio viajaba la abuela y, nada más apearse del vehículo, las niñas se empeñaron en dejar patente el cariño que le tienen con constantes muestras de afecto. Inmediatamente, doña Sofía las cogió de la mano como quiso hacer tras la Misa de Pascua en Palma y al fin se decidieron a posar los cinco juntos muy sonrientes. Se ponía remedio así al desaguisado, propiciando la foto que no pudo ser hace una semana.