Muere una niña de 8 años al chocar una moto náutica contra una barca en Murcia

Una niña de ocho años perdió la vida, a última hora de la tarde del sábado, en un accidente náutico ocurrido en La Manga, a la altura de la Escuela de Pieter, en el término municipal de San Javier. Según explicaron fuentes cercanas al caso, la menor viajaba con su padre a bordo de una moto de agua por esta zona del Mar Menor. En un momento determinado, por causas que aún se investigan, el padre cayó al agua y la niña continuó subida encima del vehículo hasta que chocó finalmente contra una embarcación que se encontraba en la zona saliendo despedida.

El Centro de Coordinación de Emergencias 112 recibió varias llamadas sobre las 20.26 horas informando del suceso. Tal y como explicaron fuentes de Emergencias, los testigos alertaban de que la menor iba sola en la moto de agua, que la habían rescatado inconsciente y que se encontraba en la plataforma de una embarcación.

El accidente se produjo a las 20.26 horas en La Manga y, según las llamadas recibidas en el 112, la víctima iba sola en la moto y se encontraba gravemente herida e inconsciente.

La niña había sido rescatada del agua y trasladada hasta la plataforma de una embarcación, donde fue asistida por los sanitarios de emergencias que no pudieron salvar su vida.

Junto a los servicios médicos, el accidente movilizó a personal y vehículos del servicio de emergencias del Ayuntamiento de San Javier, agentes de la Guardia Civil y efectivos de Cruz Roja, cuya unidad de respuesta inmediata se desplazó para ofrecer apoyo psicológico a los familiares.

Hasta la zona, tal y como explicaron fuentes de Emergencias, se desplazó personal del servicio de emergencias del Ayuntamiento de San Javier y una unidad móvil de emergencias (UME) del 061, además de agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de San Javier. Los sanitarios se afanaron en tratar de salvar la vida de la pequeña, cuyo estado era muy grave. Pese al esfuerzo poco después falleció. A primera hora de la noche de este sábado, Emergencias solicitó la ayuda de un equipo de psicólogos de Cruz Roja que se desplazó a la zona para atender a los familiares ante la fuerte conmoción por el siniestro.