Iberdrola pagará dos millones a Langreo para desmantelar la térmica en tres años

Eso sí, lo hace con condicionantes. Uno de ellos es «la presentación de un aval de dos millones de euros para garantizar la continuidad de los trabajos, además de la restauración ambiental de la parcela y la regulación de todas las actividades parejas a estas obras», explicó ayer la alcaldesa langreana, Carmen Arbesú.

Según añadió, la compañía deberá presentar las autorizaciones necesarias para realizar los trabajos y un cronograma con periocidad quincenal para conocer el tráfico pesado de entrada y salida al solar que origine el desmantelamiento».

En él deberá figurar también «la inspección técnica y el certificado de los vehículos y la maquinaria, así como el plan de vigilancia de la calidad acústica, con todas las mediciones de las áreas habitadas cercanas a la instalación mientras duren los trabajos, y en cada fase de implantación de maquinaria susceptible de poder originar molestias acústicas o de producción de polvo, ya que son cuestiones que nos parecen importantes».

Entre las exigencias de Langreo, «siempre amparadas por la ley», aparece también que «no se desarrollen trabajos en horario nocturno y se evite solapar aquellas actividades más ruidosas».El Ayuntamiento deja claro así todas las condiciones que ha trasladado a la eléctrica junto a la licencia.

La previsión es que Iberdrola comience los trabajos en las próximas semanas y no será hasta 2024 cuando la imagen de Lada sufra un gran cambio, dejando atrás la silueta de la central térmica que lleva dibujando este paisaje langreano desde 1949.

Fue entonces cuando se inauguró el primer grupo de 25 megavatios (MW). Dos años más tarde llegaría el segundo grupo y en los años sesenta se construía el tercero. Ha sido una instalación que aportó al concejo muchos puestos de trabajo, pero que también hizo que en noviembre 1979 el municipio fuese considerado el más contaminado de España, con su correspondiente sanción a Iberdola.

Incierto es el futuro de dicha parcela, de 24,61 hectáreas en plena área urbana langreana. Iberdrola presentaba este mismo año al programa europeo Next Generation EU y a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Ministerio de Transición Ecológica un proyecto para construir una planta de hidrógeno verde que supondrá una inversión de 155 millones de euros compartida con otros proyectos similares distribuidos por todo el país.

Por su parte, los trabajadores de la térmica habían planteado la posibilidad de poner en marcha un complejo energético alternativo. También sindicatos y el propios Consistorio han solicitado a la eléctrica proyectos para Lada. Nada se ha concretado hasta el momento. Solo su desmantelamiento

Iberdrola ya ha iniciado las tareas previas a dicha desmantelación, unos trabajos que se han centrado en la retirada de combustible de los diferentes mecanismos de la térmica, así como de algunos aislamientos térmicos. Incluso ha llegado a retirar parte de la maquinaría ligera y motores auxiliares que fueron trasladados a otros centros de trabajo para su aprovechamiento. El desmantelamiento fue anunciado en 2007, tras pedir Iberdrola al Gobierno central su cierre basándose en su política de reducción de emisiones de CO2. Se le otorgó en 2020.