El Huca, referente en tecnología digital
Asturias es la primera comunidad que emplea inteligencia artificial, impresión 3D y hasta un robot humanoide para tratar la escoliosis
Buenos días, presidente; me alegra verle por aquí y que haya respondido a nuestra invitación. Espero que le guste el proyecto en el que participo». Quien pronunciaba estas palabras ante el presidente del Principado, Adrián Barbón, era Nao, un robot humanoide de 53 centímetros de altura programado para la interacción social. Este pequeño androide interviene en un proceso médico pionero en España, que ha convertido al HUCA en el primer hospital que aplica la tecnología digital, la inteligencia artificial y la fabricación en 3D para tratar la escoliosis idiopática en adolescentes.
De esta técnica de vanguardia ya se benefician 12 jóvenes y una mujer adulta, aunque se calcula que podría ser necesaria su utilización en más de 200 pacientes. Para tratar de enderezarles la columna, se fabrican unos corsés sensorizados y a medida que han colocado Asturias en el mapa de la innovación biosanitaria. Nao da la bienvencida a los pacientes en el momento de tomar las medidas, un proceso muy incómodo que el 'robot social' del servicio de Rehabilitación del HUCA hace mucho más llevadero, con preguntas, explicaciones y una conversación adaptada al lenguaje adolescente.
Ayer, incluso se marcó un baile ante el presidente autonómico, como los que hacen furor en la red social tik tok. «Es el único robot social en un entorno sanitario real que existe en España», subrayaba ayer Jorgina Díaz, en representación de Alisys, la firma que ha desarrollado este amigo de última generación. El proyecto, en el que el equipo de Rehabilitación infantil y prótesis del HUCA lleva tiempo trabajando, con el doctor José Antonio Fidalgo al frente, se enmarca dentro del programa e-Health. En dicho programa, que forma parte de lo que se conoce como Misiones Científicas de Asturias, participan diferentes entidades y empresas relacionadas con la tecnología y la investigación sanitaria, entre ellas, entre ellas Izertis o Idonial, que se ocupa de la impresión 3D de los corsés. «La ciencia y la innovación son determinantes para el futuro de Asturias y la colaboración público privada es absolutamente indispensable», aseguró Adrián Barbón en el acto que ayer se celebró en el HUCA para presentar el resultado de este proyecto.
Candela y Claudia estrenan un sistema que despierta interés en todo el país
Candela Coto tiene 13 años y Claudia Candanedo, 15. La primera lleva año y medio con un 'corsé HUCA' y la segunda lo empezó a usar el pasado verano. Las dos forman parte de ese primer grupo de pacientes con escoliosis idiopática al que se les está aplicando esta innovación sanitaria que permite personalizar el tratamiento y hacer un seguimiento online de su evolución. «Estamos muy agradecidas de poder contribuir a este proyecto», coincidían ayer ambas. Por este nueva tecnología se han interesado una veintena de hospitales, que incluso enviaron a sus residentes a una estancia de aprendizaje. Desde el diagnóstico hasta la entrega del corsé, todo se hace en el HUCA.
El presidente regional aprovechó la ocasión para recordar a los que «tanto criticaron la creación de una Consejería de Ciencia e Innovación», que «en política sobra táctica y falta visión estratégica». Misiones Científicas tiene su origen en la remota llegada del hombre a la luna. Su adaptación «más terrenal y cercana» supone «implicar a empresas, grupos de investigación, centros tecnológicos e instituciones en proyectos que reduden en una mejora para la sociedad»
En la presentación participaron, además de Barbón y el doctor Fidalgo, los consejeros de Ciencia y de Salud, Borja Sánchez y Pablo Fernández, respectivamente; la atleta internacional Alba García, que contó su experiencia con la artritis reumatoide que la retiró del deporte; Jorge Barrero, director de la la Fundación Cotec; David González, representante de e-Health, y Candela Coto y Claudia Candanedo, las dos primeras adolescentes asturianas en llevar 'un corsé 3D HUCA'.