Incendios en Asturias: El trabajo de los bomberos y la lluvia reduce a siete los incendios

En Asturias se registran en estos momentos siete incendios forestales, después de que muchos de los que aún se mantenían anoche fueran sofocado por el duro trabajo de los equipos de emergencias y la aparición de las primeras lluvias, especialmente en el suroccidente asturiano. Ante esta mejoría de la situación, el consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, Guillermo Martínez, decretó a las 14:31 horas el paso a fase de alerta del Plan Especial de Incendios Forestales (Infopa), que lleva consigo la retirada de los medios procedentes de otras regiones, caso de la Unidad Militar de Emergencias y de los helicópteros y personal de Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

El Principado ha contabilizado hasta 380 fuegos en el episodio de incendios que ha afectado a Asturias desde el pasado jueves y que ha castigado a 39 municipios. Son los últimos datos que ha facilitado el Gobierno por boca de su portavoz y presidente en funciones, Guillermo Martínez, al término de la reunión semanal del gabinete, esta mañana, en Oviedo.

El día más complicado fue el domingo, con 139 incendios al mismo tiempo. Los servicios del 112 han recibido 13.154 llamadas, a una media diaria de 2.413. En los trabajos de extinción han trabajado más de 400 efectivos.

Martínez, que defendió las labores de prevención realizadas por el Gobierno, apeló a la colaboración ciudadana para «poner a disposición de la justicia» a los pirómanos que han provocado este «atentado medioambiental», dando por supuesto que la mayoría de estos incendios han sido intencionados.

Aunque todavía no se han terminado las labores de perimetración de los incendios, para conocer la extensión calcinada en cada uno de ellos, el consejero avanzó que los de estos días habrán quemado «mucho más» que en todo el año pasado, que fue uno de los mejores de la serie histórica, cuando fueron arrasada 2.054 hectáreas.

Por otro lado, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, criticó en Mieres la política forestal de España que, según dijo, «deja mucho que desear». El responsable sindical reconoció la labor de «los servidores públicos» que han trabajado estos días en la extinción de los incendios: «Los bomberos del Principado creo que han hecho una labor extraordinaria», señaló Álvarez, pero apuntó que «me van a permitir que haga una reflexión: los incendios se apagan cuando llueve y todos sabemos que la política forestal en nuestro país deja mucho que desear».

El secretario general de UGT hizo hincapié en que «todos nos ponemos a llorar cuando se queman los bosques y no nos paramos de pensar que hay que tenerlos en unas condiciones que permitan apagar los incendios y conservarlos, así como usar los recursos naturales que general».

En cuanto a la personas que fue sorprendida prendiendo fuego a un monte en Onís por la tripulación de uno de los helicópteros de Bomberos de Asturias, la Guardia Civil continúa con las pesquisas para llegar a su identificación, para lo que se requiere la máxima colaboración de la ciudadanía. Desde la Coordinadora Ecoloxista d'Asturies se ha reclamado «una rápida actuación para pillar a los responsables de estos delitos y avanzar en las políticas de prevención que eviten estos incendios» y que «se acabe ya con esta impunidad». Además, insiste en que se vuelva a prohibir el pastoreo en las zonas quemadas estableciendo acotamientos de los terrenos afectados.

Hay que señalar que, según los datos de la Fiscalía de Medio Ambiente y de la Guardia Civil, después de las investigaciones realizadas tras las oleadas de incendios de diciembre de 2015 y octubre de 2017, se concluyó que más del 80% de esos fuegos fueron intencionados y apreciaron la existencia de una relación causal con la regeneración de pastos.

Mientras avanzan las investigaciones para identificar al pirómano de Onís, los equipos de extinción trabajaron ayer a fondo para sofocar los 36 incendios con los que amaneció el día. Después de una extenuante labor contra las llamas y contra las fuertes rachas de viento, que llegaron a alcanzar los 94 kilómetros por hora, se terminó la jornada con 23 fuegos que afectaban a 19 concejos. Precisamente el fuego hizo que la mitad de los medios aéreos no pudieran volar durante la tarde, por motivos de seguridad.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantendrá hasta las 11:00 horas de hoy la alerta amarilla por rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora, una situación que ayer impidió el trabajo de la mitad de los medios aéreos disponibles.

La Aemet prevé que hoy se registren lluvias y chubascos que se irán generalizando e intensificando por la tarde, lo que podría ayudar a terminar de extinguir los fuegos.

En la jornada de ayer hubo buenas y malas noticias. Las buenas pasan porque hacia las siete de la tarde se dio por extinguido el incendio de Soto de los Infantes (Salas), que calcinó más de 500 hectáreas, y a primeras horas de la tarde se sofocaron también los tres últimos fuegos del concejo de Llanes. Ambos puntos habían concentrado la mayoría de los esfuerzos de los equipos de emergencias en las últimas jornadas. Pero, por contra, el incendio de La Bobia ha tomado gran magnitud, preocupando a las autoridades, así como otro generado en Carabanzo, en el municipio de Lena, con la particularidad de que éste fue uno de los que no pudieron contar con la participación de los helicópteros, debido al fuerte viento.

Guillermo Martínez dijo que, precisamente por las condiciones meteorológicas, «tenemos que ser muy cautelosos, porque se pronostican rachas de viento de cien kilómetros por hora. Aunque los incendios de Onís y Lena son los que más preocupan, hay otros más pequeños que hay que vigilar por si se reavivan. Por eso, hemos realizado labores de enfriamiento y estabilización». El consejero miró al cielo ante la esperanza de que pueda llover pronto. Cayeron algunas gotas en la zona occidental de la región y en la cordillera, pero no lo suficiente para ayudar en las labores de extinción. De todas formas, Martínez aseguró que, «de momento, todos los operativos estarán en Asturias por la mañana. Después, dependiendo de la meteorología se irán retirando. El operativo funciona de manera muy ágil en la respuesta de todos y cada uno de los incendios».

Quien también miró ayer al cielo fue el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, quien dijo que «espero y deseo que en las próximas 48 horas se pueda definitivamente resolver el tema».