Brico Dêpot da marcha atrás en el proceso de venta abierto y no cerrará en Trasona

La tienda de Brico Dêpot en Trasona no cerrará sus puertas como había anunciado el grupo empresarial británico al que pertenece en 2018. De esta manera el medio centenar de personas que componen la plantilla del establecimiento corverano podrán mantener sus puestos de trabajo, que habían quedado en el aire.

Finalmente el grupo Kingfisher, propietario de los 31 establecimientos de Brico Dêpot en la Península Ibérica, ha decidido mantener la línea de negocio en España y continuar con las 28 tiendas abiertas. Así lo informó este mes el director ejecutivo de la compañía, Thierry Garnier durante la presentación anual del grupo. A pesar de haber dado marcha atrás en el proceso de venta abierto reconocen que «la firma ha generado un elevado interés entre los potenciales compradores».

La decisión de mantener la línea de negocio en España y Portugal se debe a que «se puede mantener una compañía rentable y sostenible bajo la marca Brico Dêpot», detalló Garnier. A partir de ahora el grupo Kingfisher pretender dar nuevos aires al negocio con la digitalización de algunos servicios. En concreto, Brico Dêpot ya ha puesto en marcha el sistema click&delivery y el click &collect, que «ha tenido una acogida muy positiva tanto entre el público profesional como entre los particulares».

El director general de Brico Dêpot en la península, Mike Foulds, destacó su satisfacción por la decisión y recalcó que «tenemos una marca reconocida por unos precios muy competitivos combinados con gamas fuertes localmente, una fortaleza que tenemos que aprovechar». Además, lanzó un mensaje tranquilizador sobre este retroceso en el proceso de venta e hizo hincapié en que «esta decisión nos aporta estabilidad, una visión y oportunidades de crecimiento que ya hemos empezado a ver con el lanzamiento de nuestro canal de venta e-commerce».

Los 31 establecimientos dan trabajo a unas 2.000 personas, medio centenar en Asturias, que volvieron en el mes de mayo a la normalidad tras el cierre de los establecimientos por el estado de alarma. «Ver como nuestros equipos han hecho de la innovación y la agilidad una norma durante la etapa del COVID-19 me hace ser optimista para encarar los retos que tenemos por delante. Ahora que tenemos claridad por parte de Kingfisher podemos seguir fortaleciendo nuestra posición de líder de valor en el sector de las mejoras para el hogar en España y Portugal», recalcó el director general en la península.